Apostol

Camino Sanabrés

Etapa

13

Tramos

Castro- Dozón – Silleda

27.4 km

1. Castro- Dozón - Pontenoufe - 7.9 km

Tras descansar en Castro, reanudamos nuestra andadura, girando a la derecha, justo en el punto en el que vemos las últimas casas de la localidad. Cruzamos la carretera nacional, encontrando en nuestro camino el templo de San Pedro de Dozón.

Proseguimos nuestro caminar de forma paralela a la carretera y, así andaremos, alternativamente, por caminos de tierra y por carretera hasta llegar al Alto y aldea de Santo Domingo. Al cabo de pocos minutos, abandonamos la carretera y nos internamos en un camino que, atravesando la aldea de Puxallos, nos conduce hasta Pontenoufe.

2. Pontenoufe - Botos - 8.2 km

Este pequeño pueblo está recostado en una ladera, que cruzaremos, dirigiéndonos hasta el túnel del ferrocarril; atravesamos el túnel y el río Deza. Seguidamente nos dirigimos a la derecha a través de una pista asfaltada, que nos conduce hasta la carretera nacional. En este punto, giramos a la izquierda y, tras recorrer por una acera unos metros, aproximadamente, nos encontramos con una bifurcación de caminos Nosotros elegimos el camino de la derecha y cruzamos la aldea de Bouza, con el propósito de dirigirnos hacia Botos.

3. Botos - Laxe - 1.7 km

No entramos en Botos, sino que dejamos atrás y a un lado esta pequeña aldea, tras haber contemplado el hermoso «Cruceiro», que se eleva delante del templo parroquial. Seguimos caminando a buen paso ya que muy poco es lo que nos queda para llegar a la localidad de Laxe.

4. Laxe - Silleda - 9.6 km

Entre Laxe y Silleda hay 9 largos kilómetros, pero que también se hacen entretenidos, pasar por Prado y sobre todo por Puente Taboada, que es uno de los lugares más bellos del Camino, bien merece la pena disfrutar de todo ello haciendo pequeñas paradas.

Llegamos a este importante pueblo ganadero de Silleda, entrando por las proximidades de su templo parroquial.

Es un lagar con tradicional zona de paso, posee una lápida de época romana, dedicada a Laribus Viálibus, divinidad de los caminos y protectora de los viajeros. Por la belleza de su entorno natural recibe el sobrenombre de «Capricho de la Naturaleza».

Silleda, además, no sólo es rica en bellos paisajes, sino que posee un patrimonio artístico de un valor y una belleza incalculables, ya que, al margen de su patrimonio castreño, cuenta con numerosos y muy hermosos monumentos románicos, góticos, barrocos y neoclásicos.

En Silleda podemos prolongar nuestra estancia para estar en mejores condiciones físicas y psicológicas para afrontar el final de nuestra peregrinación, que ya casi alcanzamos con la mano. Cuenta esta localidad con todo tipo de servicios que podamos necesitar.