Apostol

Ruta de la Lana I

Etapa

4

Cultura

Almansa

Los primeros testimonios de poblamiento en el término se dan en torno al V milenio a.C. y se concretan en la presencia de pinturas rupestres prehistóricas de estilo levantino. Yacimientos arqueológicos importantes nos muestran vestigios de poblados de la Edad de Bronce, II milenio a.C., entre los que destaca el del Cerro de los Cuchillos. Posteriormente, se asentaron otras culturas: del I milenio a.C. en la montaña del Mugrón, se encuentran las ruinas de una ciudad ibérica conocida con el nombre de Meca, considerado como uno de los hallazgos más importantes de la zona. Griegos y romanos pasaron por Almansa, dejando constancia del importante nudo de comunicaciones que desde antaño ha sido esta ciudad. Una de sus principales vías, Heráklea o Hercúlea, pasaba cerca del término.
El Islam llega a la Península, y deja su huella en la fortaleza que domina la ciudad; concretamente en el período almohade es cuando tiene origen el Castillo. En el siglo XIII, Almansa dejó de ser musulmana pasando a formar parte de la corona de Castilla. Debido a su importante situación, Alfonso X dotó a la población de los fueros y franquezas de Requena, Cuenca y Alicante, además de otros privilegios.
En tiempos de Don Juan Manuel, Almansa pasó a formar parte de su Señorío, que más tarde con Alfonso de Aragón se convirtió en Marquesado de Villena. Se entra en un período en el que los sucesivos marqueses continúan con sus propósitos de convertirse en un estado independiente de los reinos de Castilla y Aragón. El fin del marquesado fue en la guerra de Juana la Beltraneja contra Isabel la Católica; el marqués tomó parte por Juana la Beltraneja, pero el pueblo, que había estado oprimido durante mucho tiempo por sus obligaciones tributarias, se aseguró una serie de ventajas y privilegios por parte de los Reyes Católicos, decidiendo alinearse a favor de éstos. Ya en la edad moderna, en el siglo XVI se sucedieron transformaciones urbanísticas como la construcción de la Iglesia de la Asunción y la edificación de la Presa del Pantano. Y como contraste, en el siglo XVII, la ciudad sufrió un acusado periodo de despoblamiento debido a la emigración. El 25 de Abril de 1707, tuvo lugar en Almansa, una de las más importantes batallas de la guerra de Sucesión al trono español, librada entre Felipe de Anjou y el Archiduque Carlos de Austria: el Marqués de las Minas y Lord Gallway, al frente de las tropas aliadas, provocaron el choque con las fuerzas de Felipe V, que mandaba el Duque de Berwick. La victoria fue para las tropas Borbónicas, lo que les permitió el paso hacia el levante.

Alpera

Las primeras noticias de poblamiento en Alpera corresponden al periodo Paleolítico, aunque las manifestaciones humanas a nivel artístico (pinturas rupestres) no se conocen hasta el Paleolítico Superior; tienen una datación superior a los 12.000 años, y fueron encontradas en la llama Cueva del Niño. Dicha cueva pertenece al término municipal de Ayna y puede considerarse la cuna del arte rupestre albaceteño. Igualmente son muy importantes las pinturas rupestres descubiertas en su propio término municipal, en la llamada Cueva Vieja, descubiertas en 1910. Fueron declaradas Monumento Histórico- Artístico en el año 1924 y declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO en el año 1998.

Las Fuentes

Las pinturas rupestres encontradas en la Cueva de la Vieja en el término municipal de Alpera están declaradas Monumento Histórico Artístico y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Son un ejemplo del Arte Rupestre Levantino.</u
La conocida como la Cueva de la Vieja conserva un paño de casi diez metros, donde predominan las figuras humanas, se conservan más de 170 motivos pintados: 33 arqueros, 13 figuras humanas y 3 mujeres, además de arcos, flechas, etc.
Entre la fauna pintada cabe destacar: 15 ciervos, 10 cabras, 5 toros, 6 carnívoros y varios cuadrúpedos de especie no precisa.
También se conserva en la Cueva de la Vieja un grupo de 37 motivos abstractos, expresión creencial de los grupos productores neolíticos, que corresponden al denominado Arte Esquemático, y cuya cronología se sitúa entre 7.000 y 3.500 años antes del presente.