Apostol

Camino Mozárabe

Etapa

13

Monumentos

Alcaudete

Iglesia de Santa María

La planta de la iglesia es rectangular. Está dividida en tres naves, que dividen transversalmente a cada nave en cinco tramos de una longitud de 6 m aproximadamente, menos el tramo de la cabecera que es de 4 m. La planta de estos pilares suele ser hexagonal con lados irregulares; los pilares de la cabecera son los de mayores proporciones y su planta es romboidal; las plantas de las pilastras son aún más complejas: semiromboidales, rectangulares y poligonales.

El alzado de la iglesia presenta en altura tres naves divididas por dos hileras paralelas de pilares y arcos ojivales que la recorren de pies a cabeza, acentuando su sentido longitudinal y haciendo desaparecer en altura la articulación de tramos transversales a las naves al no existir arcos ojivales perpiaños. Esto no ocurrirá en el tramo transversal de la cabecera, ya que aparecerán arcos perpiaños que permiten una cubrición distinta del resto de la iglesia, a base de bóvedas de nervios. Los pilares se transforman en delgados haces de molduras cóncavo-convexas, cuyas basas se presentan a distinta altura, y sus capiteles se han convertido en una franja o capitel corrido, con motivos vegetales que forman la típica decoración del «crochet» gótico. Los arcos ojivales no son muy agudos, presentando un foco de 7 m de anchura por 1,5 m de altura. El perfil de estos arcos mostraría la continuación y prolongación de las molduras correspondientes a los lados longitudinales de cada pilar. Los muros de la iglesia aparecen lisos y cerrados en su parte N. y E., mientras que se abren por unos tragaluces y puerta oriental por el lado S., y por el lado O., a través de la puerta del Perdón.

Por último, la cubierta de la iglesia es a dos aguas, por lo que presenta una altura desigual de las naves laterales, más bajas que la central. Exteriormente, a los pies de la iglesia, ésta adoptará una peculiar forma en hastial. Interiormente, la cubierta estuvo constituida por un artesonado de madera, que desgraciadamente ha desaparecido, salvo en el tramo transversal de la cabecera donde la cubrición se hizo con bóvedas de nervios

Parque

En la parte nueva nos encontramos este parque público, lugar de recreo y también de refugio para resguardarse de los calores de verano. Es éste uno de los más amplios y cuidados parques de la provincia. Destaca por su componente vegetal, definido por una arboleda madura y variada, formada por raras especies de otras latitudes como los tilos, castaños de indias, carias y fresnos.

Castillo

El alcázar fue centro de protección de una madina comercialmente muy activa, ubicado en una importante red viaria y comercial y fue militarmente codiciado tanto por musulmanes como por cristianos.

De estas primitivas defensas no quedan restos, debido a la significativa reestructuración que sufre el conjunto defensivo en época almohade. En este período, el núcleo de población se rodea de una muralla y en la cumbre del cerro se edifica un alcázar construido con tapial de tierra sobre basamento de mampostería.

El Castillo actual, construido sobre el alcázar almohade, es un exponente de fortaleza de frontera del S. XIII-XIV. Las murallas y torres, construidas con tapial serán reforzadas con mamposteria tras la conquista cristiana en 1246, por los frailes de la Orden de Calatrava. Conservan los adarves o ronda de la guardia a través de los cuales podemos recorrer todo su recinto y acceder al interior de las torres. Destacan el refectorio y caballerizas así como la imponente torre del homenaje.

Fue declarado Monumento Histórico en 1985.

Cortijo de la Paloma

Laguna del Salobral

Baena

Castillo-Almedina

Es una edificación del siglo IX. Fue erigida tras la rebelión del caudillo muladí Omar Ibn-Hafsum.

Tras la Reconquista, por capitulación el 24 de agosto del año 1240, la antigua mezquita privada musulmana se convirtió en capilla cristiana bajo la advocación del Apóstol San Bartolomé. Conservó el arco de herradura que sirvió de acceso hasta su demolición en los primeros años del pasado siglo XX.

Durante la Edad Media fue un formidable bastión en la frontera con el reino de Granada. Sus despendencias alojaron a ilustres huéspedes como los Reyes Católicos, el Cardenal Cisneros y el Condestable don Álvaro de Luna. Como prisionero, estuvo en la fortaleza Boabdil el Chico, rey de Granada. Esta fortaleza conservó las banderas y estandartes arrebatadas a los musulmanes.

A finales del siglo XVI se construyó un palacio en las antiguas estancias de la alcazaba y se convirtió en residencia de los administradores de los duques de Sessa y Baena, propietarios del del edificio hasta el año 1897.

Monumento al aceitunero

En el jardín situado frente a la entrada de la iglesia, se ha instalado el monumento homenaje a los aceituneros, obra del artista Francisco Ariza, A los aceituneros, a las aceituneras , que consta de cuatro estatuas de aceituneros representando las tareas de la recogida junto a los olivos que se han instalado.

Arquitectura Civil - Plaza de la Constitución

Es el verdadero centro neurálgico de la ciudad, en el que conviven edificios de raigambre barroca dieciochesca con otros de última actualidad, como es el caso de las Casas Consistoriales que obtuvo el premio de arquitectura del Colegio de Arquitectos de Andalucía.

Esta plaza, conocida como “Plaza del Coso” debido a los numerosos festejos taurinos que allí tenían lugar desde tiempos medievales, ha sido remodelada recientemente para darle un aire moderno y a la vez apacible.

En un lateral, justo enfrente del ayuntamiento, se encuentra sobre un elevado pedestal el Monumento al Judío, esculpido en bronce por Paco Ariza, que representa al principal protagonista de la Semana Santa baenense, el judío Coliblanco o Colinegro. Dentro del conjunto que representa la Plaza de la Constitución, se han erigido dos estatuas que rememoran a Santo Domingo de Henares y a Juan Alfonso de Baena. El primero, fue un monje dominico del S. XVIII enviado como misionero a Vietnam, donde en 1802 fue nombrado obispo y donde, más tarde, murió mártir y fue canonizado por Juan Pablo II. El segundo, fue un poeta del S. XV que recopiló textos medievales en un manuscrito conocido como “Cancionero de Baena”, encargado por D. Juan II de Castilla para su deleite, y que goza de fama a escala internacional, dando lugar a la creación en nuestra localidad de un centro de investigación.

Escultura de Dn. Joaquín del Pino

En ella se le rinde homenaje, con una escultura en bronce, a D. Joaquín del Pino y Rozas, nacido en Baena en el año 1729. Este personaje marchó hacia tierras americanas, donde desarrolló una amplia carrera política y militar, llegando a ser gobernador, capitán general y virrey del Río de la Plata. Por ello, es considerado como uno de los grandes hombres de la historia de América.

Iglesia de Ntra. Sra. de Guadalupe

Según cuenta la tradición, en este lugar existía una ermita dedicada a San Sebastián y fue en este paraje donde se produjo la aparición de la Virgen a un caballero que se dirigía al Santuario de Guadalupe en Extremadura, dispensándole de su voto, si allí mandaba pintar su imagen. A partir de este momento se rinde culto a la Virgen de Guadalupe, actualmente patrona de la ciudad.

En el año 1527 D. Pedro Fernández de Córdoba, hermano del cuarto Conde de Cabra, construyó un Convento de la Orden de Predicadores eligiendo para levantar el edificio un terreno contiguo a la citada ermita. Cuando se levantó la iglesia del Convento, ésta última quedó incluida como capilla de la misma, dando lugar a que a principios del S. XVIII hubiese que trasladar el muro con la pintura de la Virgen de Guadalupe. El edificio del Convento fue derribado en 1855 y la Iglesia, se conserva aunque ya muy reformada.

Consta de una gran nave central sin crucero y dos naves laterales, separadas por arcos de medio punto. Destaca el artesonado mudéjar del S. XVI que cubre la capilla mayor, único en su género en toda la provincia, así como un retablo de madera tallada y policromada del segundo tercio del S. XVIII.

En la nave de la epístola se encuentra la Capilla de la Virgen de Guadalupe. Destaca otro artesonado también octogonal.

Digno de mención es la imagen del Cristo de la Sangre, datado en el S. XVII y declarado como Bien Cultural de Andalucía por la Junta de Andalucía en 1.988 y que según el profesor Hernández Díaz “es una pieza magistral” que se debe atribuir a los hermanos García.

Iglesia de San Francisco

La Puerta de Córdoba conduce finalmente a la Iglesia de San Francisco, que perteneció a un antiguo convento franciscano.

El templo se inició en 1694 y responde al modelo de iglesia conventual barroca con planta de cruz latina y cúpula oval sobre el crucero.

Los muros aparecen decorados con pinturas al fresco.

Ostenta el templo un buen retablo barroco de aproximadamente el año 1730, que preside una imagen coetánea de Jesús Nazareno, patrón de Baena.

Iglesia de Santa Mª La Mayor

Templo gótico del siglo XVI, que consta de tres naves separadas por esbeltos arcos apuntados, al igual que el toral, que da paso a la capilla mayor, cerrada por reja plateresca y cubierta por una bóveda estrellada.

Entre las obras artísticas que guarda esta iglesia que la paulatina restauración ha ido rescatando de la ruina a que la condenaron la Guerra Civil y el posterior abandono, hay que destacar el retablo plateresco labrado en yeso de la capilla de la Asunción, la imagen gótica de Nuestra Señora de la Antigua, esculpida en piedra y la custodia procesional de plata repujada.

Al exterior destacan las portadas del ángel de estilo gótico-renacentista, y del Perdón, plateresca.

Dominando desde esta altura el casco urbano, se alza la torre, cuya base es un probable alminar musulmán, al que se incorporó el campanario barroco en el XVIII.