Apostol

Vía Augusta

Etapa

3

Cultura

Jerez de la Frontera

El nombre latino de (H)Asta Regia, sin conexión con el nombre actual, se aplica a una antigua ciudad que se encuentra hoy en la pedanía jerezana de Mesas de Asta, unos 11 kms al oeste de Jerez, una mansio documentada de la “Vía Augusta”. El nombre castellano actual viene de la forma árabe Sherish. A Xerez se le añadiría al poco tiempo de la Frontera, al encontrarse en la frontera con el Reino Nazarí de Granada.
Durante los siglos XII y XIII Jerez vivió una etapa de gran desarrollo, construyéndose su sistema defensivo y configurándose el trazado urbanístico del actual casco antiguo. Con la conquista de Sevilla en 1248 por Fernando III el Santo, el área de Sherish quedó sometida bajo una especie de protectorado castellano, entre la zona conquistada y la frontera granadina. En 1264, tras la revuelta de los mudéjares, una campaña militar de Alfonso X el Sabio incorporó definitivamente la ciudad y su reino a la Corona de Castilla, concretamente al Reino de Sevilla. Según el libro de repartimiento de la ciudad, redactado tras la conquista, existían en ella veintiún cascos de bodega y siete mezquitas.
El Descubrimiento de América y la Conquista de Granada, en 1492, facilitaron que Jerez fuera una de las ciudades más prósperas de Andalucía gracias al comercio y su cercanía a los puertos de Sevilla y Cádiz.
Aunque en el siglo XVII la decadencia política, económica y social de la España de los últimos Austrias deja también su huella en la ciudad, esto no impide que durante el siguiente siglo la ciudad continúe con buen ritmo una nueva etapa de modernización y desarrollo. Es a partir de entonces cuando Jerez se hace mundialmente famosa y reconocida por sus vinos y sus numerosas bodegas.
Durante los siglos XIX y XX han nacido y crecido en Jerez artistas de gran prestigio en el cante y guitarra flamencos. En esta ciudad se encuentran actualmente la Cátedra Andaluza de Flamencología y el Centro Andaluz de Flamenco, y se proyecta la construcción de la Ciudad del Flamenco. Por todo ello, Jerez es considerada la cuna de este arte, con gran devoción de aficionados procedentes de diversos países, incluso del Japón.
Tras la crisis bodeguera a comienzos de los noventa, actualmente la ciudad busca diversificar la industria. Un sector económico fomentado con éxito es el turismo, debido a la fuerte identidad de las señas de la ciudad (vino/brandy, flamenco y caballos), el atractivo de los festejos (su inigualable Feria del Caballo en primavera) y al importante patrimonio histórico que posee, además de eventos como el Mundial de Motociclismo.

El Cuadrejón Área de Servicio

El Cuervo

La presencia humana en esta región se remonta hasta el Neolítico y la Edad del Bronce, aunque en sus orígenes los terrenos de las actuales marismas del Bajo Guadalquivir se encontrarían bajo las aguas del llamado Lacus Ligustinus. En época romana se sitúa en una encrucijada de caminos con la calzada denominada Vía Augusta atravesando su término camino de Hispalis, circunstancia que marcaría el futuro de la población.
Muy cerca, en la Sierra de Gibalbín, existen los restos de una ciudad romana y los de varias villas de la misma época, así como los de la torre de un castillo de época medieval en la que son claramente visibles sillares romanos.
Durante la Edad Media, este núcleo de población era conocido como El Cuervo; el propio Alfonso X El Sabio lo menciona en los repartimientos de tierras en el año 1274.
Por su situación en zona de campiña y de grandes haciendas agropecuarias, esta zona demandaba mucho trabajo temporal. Los primeros inmigrantes del pueblo procedían de otras localidades de la comarca, como Algodonales, Arcos de la Frontera, Bornos, Grazalema, Lebrija, etc. Estos inmigrantes trabajaban en los cortijos de la zona y muchos se fueron asentando definitivamente en el pueblo. Es un establecimiento de carácter semiespontáneo, construido por jornaleros y vendimiadores. La mayoría de las edificaciones se levantan sobre pequeñas parcelas agrícolas, con tipologías autoconstruidas (inicialmente chozas).
En la foto: RESTOS DEL CASTILLO ALHOMADE DE LA SIERRA DE GIBALBÍN (TÉRMINO DE JEREZ)