Algunos sectores defienden un descenso de peregrinos de hasta el 40% mientras que otros afirman que hay más caminantes.
La llegada de peregrinos al Bierzo en pleno año jacobeo es diferente dependiendo del cristal con el que se mire o, más bien, de quien sea la fuente del escrutinio. Algunos aseguran que se ha producido un descenso en las visitas de entre un 30 por ciento y un 40 por ciento -”este es el caso del hospitalero del albergue de Molinaseca y tesorero de la Red de Albergues del Camino de Santiago en Castilla y León, Alfredo Álvarez-”. Mientras tanto, otros -”dicho sea por la Asociación de Amigos del Camino de Santiago en el Bierzo-” corroboran que aunque está habiendo menos peregrinos de los que se esperaban, sí se ha producido un aumento. «Entre enero y junio del año pasado se contabilizaron 11.476 peregrinos y en el mismo período de este año el número aumentó hasta los 12.731», aseguró uno de los responsables de los Amigos del Camino de Santiago, Domingo Enrique Sánchez. Esto quiere decir que hay exactamente 1.255 caminantes más.
Entonces, cómo se explica que mientras unos avalan el aumento, otros lamenten el bajón. El hospitalero de Molina asegura que las expectativas que se han puesto en el Año Santo, el «boom» de peregrinos que los medios de comunicación anunciaron y la crisis han motivado el descenso. «La gente ha preferido no hacerlo porque esperaban grandes masas, pero para nada es así», afirmó.
