El presidente de la Junta de Castilla y León asegura que la ruta jacobea forma parte de su vida “y de su “manera de entender la vida”
La vinculación de Juan Vicente Herrera al Camino de Santiago es profunda. Es cierto que no se entiende la personalidad del presidente de la Junta de Castilla y León sin una mirada a los valores que representa la Ruta Jacobea. Él mismo lo entiende así: “El Camino forma parte de mi vida y de mi manera de entender la vida”, confiesa a preguntas de la agencia Ical para concluir: “te ayuda a pisar seguro en el camino de la vida”. Por ello, destaca una mirada a esta Calle Mayor de Europa como el marco en el que se aprende el carácter enriquecedor de lo distinto y la importancia de valores como la autenticidad, la integridad, la solidaridad o el sentido del límite.
¿Qué significa cultural y socialmente en el siglo XXI y en la España autonómica el Camino de Santiago?
El Camino de Santiago es como la vida misma, un itinerario lleno de diferencias donde se aprende que lo distinto no separa, sino que enriquece. La España autonómica también es así, el autonomismo, si lo entendemos en clave de utilidad, integración y cooperación contribuye a enriquecer un proyecto común, el de España, y al tiempo acerca la Administración a los ciudadanos con el único de propósito de mejorar su calidad de vida.
¿Qué valores aporta a la sociedad actual?
El Camino demuestra al hombre del siglo XXI cuánto nos hemos complicado la vida innecesariamente, y cuánta importancia tiene la capacidad de sorpresa, la autenticidad, la integridad, la solidaridad, el equilibrio, la hospitalidad, la generosidad, o el sentido del límite.
¿A qué obliga a las administraciones y a la sociedad el Camino de Santiago, como seña de identidad común?
El peregrino ve el Camino como un todo, lo que obliga a las Comunidades a colaborar en su conservación y cuidado. En esa línea, desde Castilla y León hemos impulsado un Convenio con Aragón, Navarra, La Rioja y Galicia, que coordina las actuaciones en materia de mantenimiento, conservación, y promoción del Camino Francés. Tres son los programas principales que se desarrollan en este marco de colaboración: el proyecto Hitos del Camino, que supone la intervención en 25 monumentos de significación jacobea con el objetivo de conservar, restaurar y difundir sus valores promocionales; el programa Patrimonio Jacobeo Abierto que está permitiendo la apertura diaria, a disposición de peregrinos y visitantes, de más de 200 monumentos a lo largo de todo el Camino Francés, homogeneizando actuaciones entre las Comunidades. Y un programa de Peregrinaje Musical, que está propiciando el intercambio y la itinerancia de conciertos musicales por los grandes conjuntos sinfónicos de nuestras Comunidades. Además se ha impulsado el programa Camino de Estrellas, que implica que, por primera vez, a lo largo de todo el recorrido del Camino de Santiago Francés, habrá una imagen común, elementos promocionales comunes y actividades coordinadas y homogéneas. Este espíritu de colaboración con otras Comunidades se ha plasmado también en acuerdos con Extremadura y Madrid para promocionar la Vía de la Plata y el Camino de Madrid respectivamente.
¿Qué planteamiento de ‘gestión’ de la realidad Jacobea hacen desde su Comunidad? ¿Son suficientes los mecanismos para la coordinación de las políticas relacionadas con el Camino de Santiago? ¿Echa en falta alguna iniciativa? ¿Creen que los medios actuales son suficientes y tienen la calidad adecuada?
El cuidado y conservación de los Caminos a Santiago, puesto que varios de ellos discurren por Castilla y León, tiene una amplitud y una complejidad que exige una respuesta integral, que en la Comunidad se ha traducido con la aprobación en 2008 de la Estrategia de los Caminos a Santiago por Castilla y León que tiene entre sus objetivos mejorar las condiciones de los Caminos y sus dotaciones (paisajes, equipamientos, infraestructuras y servicios); preservar, proteger y potenciar los valores asociados al peregrinaje; y aprovechar los recursos existentes en torno a los Caminos como ejes de ordenación y de doblamiento, y como motor de un desarrollo rural y sostenible de la Comunidad. Con el conjunto de actuaciones planteadas en la Estrategia ofrecemos una visión y una respuesta integral dentro de la Comunidad. El reto era ir más allá y coordinar la actuación de las diferentes Comunidades por las que transcurren los Caminos a Santiago, y así lo hemos hecho como ya he mencionado.
¿Y después del Jacobeo, qué? ¿Cómo se plantea Comunidad las actuaciones en el Camino de Santiago después de este año?
La Estrategia de los Caminos a Santiago es una planificación que no tiene su punto final con el Año Jacobeo, tiene vocación de continuidad, y la colaboración con las Comunidades vecinas en ésta y otras materias forma parte de la realidad del día a día de Castilla y León. Así que seguiremos actuando en las líneas de trabajo que nos hemos marcado, desde el diálogo y la colaboración con las Asociaciones de Amigos del Camino, las Diócesis responsables de gran parte del Patrimonio histórico del Camino, las Corporaciones Locales y Diputaciones implicadas y las empresas privadas que, cada vez con mayor intensidad dentro de su responsabilidad social corporativa, se están comprometiendo en una labor de mecenazgo en este Patrimonio de todos.
En lo personal: sitúe un punto o una etapa del Camino que le ‘toque el corazón’ especialmente y, como un peregrino más, escriba una pequeña reflexión sobre el sentido de ‘su’ Camino.
Por limitarme al Camino Francés, mis tramos preferidos pasan por San Juan de Ortega y por Castrojeriz en Burgos, por el Canal de Castilla y Frómista en Palencia, y por la Magaratería y el Bierzo hasta O Cebreiro en León. El Camino forma parte de mi vida, y de mi manera de entender la vida. Un espacio a la vez sencillo y profundo, muy personal aún cuando lo compartas y lo disfrutes con otros, que te ofrece respuestas que necesitas, y que te ayuda a pisar seguro en el camino de la vida.
