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Una peregrina greco-estadounidense recoge 50 bolsas grandes de basura

13 agosto 2010 / Mundicamino

Trudy Boukas ha estado once días limpiando el Camino con la colaboración de la asociación jacobea de Astorga.

Tras ejercer el año pasado como hospitalera voluntaria en el albergue de las Siervas de María de Astorga (León), la peregrina greco-estadounidense Trudy Boukas decidió volver este año como voluntaria al Camino de Santiago, pero haciendo algo diferente. Durante once días, se ha dedicado a limpiar y recoger la basura del tramo de la ruta jacobea entre la localidad leonesa de Hospital de Órbigo y la Cruz de Ferro, en el Monte Irago, una labor por la que hoy recibió el reconocimiento de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Astorga y comarca.

Su presidente, Juan Carlos Pérez, explicó que Trudy ha recogido en esos 45 kilómetros casi 50 bolsas grandes de desperdicios y consideró que esta iniciativa “no llega a solucionar el problema de la limpieza del Camino, pero es una llamada de atención” para que tanto peregrinos como vecinos de las localidades por las que discurre el itinerario y las administraciones competentes tomen conciencia de la necesidad de cuidar más la ruta.

Durante esas once jornadas, la peregrina ha contado con la colaboración de la asociación jacobea astorgana, quien se ha encargado de llevarla cada día al lugar donde empezaba a trabajar y de recogerla cuando terminaba, “siete u ocho horas después”, además de trasladar las bolsas de basura a contenedores. Asimismo, los albergues Nuestra Señora del Pilar de Rabanal del Camino y el parroquial de Foncebadón la acogieron de forma gratuita sendas noches.

En el informe que ha realizado sobre su tarea de limpieza, Boukas explica que las zonas donde encontró más suciedad fueron las entradas y salidas de los municipios, además de las áreas de descanso ya que, aunque suelen tener contenedores para la basura, muchos no son vaciados de forma regular.

Por otra parte, destaca que muchos peregrinos le daban las gracias cuando la veían limpiando el Camino y que varios se pararon un rato a ayudarla. Respecto a los desperdicios que más encontró, señala que había muchos envases vacíos, además de papel higiénico, cajas de cigarrillos, envoltorios de todo tipo y latas de refrescos,

Como curiosidad, indica que cerca de Hospital de Órbigo llegó a recoger en cien metros unas 200 latas de refrescos vacías y que en un edificio abandonado después de San Justo de la Vega encontró cientos de cristales de botellas rotas y otros desperdicios. Además, resalta que estuvo cuatro horas en el entorno de la Cruz de Ferro retirando toda la basura acumulada.

El presidente de la asociación jacobea de Astorga explicó que van a trasladar este informe a las administraciones competentes para que tomen medidas para hacer frente a los problemas detectados, además de instar a todos los implicados a concienciarse de la necesidad de cuidar el trayecto. Asimismo, quiso agradecer públicamente la labor realizada por Boukas.