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Rosa Vázquez Santos: No todo es crear albergues, hay que impulsar la cultura en la ruta

14 septiembre 2010 / Mundicamino

La Sarriana Rosa Vázquez trabaja en el Xacobeo como investigadora después de haber vivido en Italia seis años durante los que recorrió Europa siguiendo la pisada del Camino de Santiago. Considera que la ruta es el bien más internacional de la comunidad gallega y que se debe cuidar. Toda una vida dedicada al estudio del Camino de Santiago marca la trayectoria de esta sarriana doctorada en Historia del Arte que se especializó en la ruta jacobea, hasta el punto que los organizadores de la muestra Elas fan Camiño’, centrada en la importancia de la mujer en la ruta, la han elegido como representante del mundo académico.

Pasó su infancia en Sarria, ¿qué recuerdos guarda del Camino Francés en la villa?

Mis recuerdos del Camino no son tanto de mi infancia, cuando era pequeña aún no era muy consciente de lo que suponía. Sí recuerdo como a mi padre le gustaba conversar con los peregrinos que se encontraba en sus paseos, por lo que luego llegaban a casa postales del extranjero. Aunque yo desconecté de la villa cuando me fui a Italia, me llena de orgullo encontrarme con que en ciudades como París o Londres conocen Sarria e, incluso, la calle en la que vivía, y todo gracias a la ruta.

¿Cómo surgió su participación en la exposición Elas fan Camiño?

Fue de la mano de la profesora de la Universidade de Santiago Ana Goi, con la que colaboré en algunas conferencias y quien me recomendó como ejemplo de mujer dedicada al estudio de la ruta.

¿Cuál es en su opinión la importancia de la mujer en el Camino?

El papel de la mujer en el ámbito en el cual yo puedo aportar mi visión, que es el académico, se encuentra totalmente equiparado al del hombre, si bien es normal que en algunos organismos, como el Comité Internacional de Expertos del Camino, formen parte más hombres que mujeres, ya que antiguamente estudiaban más los varones, hoy sucede a la inversa.

¿Cuándo empezó su unión con el Xacobeo y cuál es su trabajo?

Desde el principio de mi carrera, ya que realicé mi tesis doctoral sobre el Camino de Santiago con el profesor José Manuel García Iglesias, quien dirigió durante años su departamento de exposiciones y publicaciones. Seguí en contacto, hasta que en el 2008 gané su plaza de investigación Isidro Parga Pondal. Dentro de la organización realizo una labor de investigación. Mis últimos trabajos han sido en una exposición y un libro sobre Diego Gelmírez y la dirección de la nueva revista ‘Ad Limina’ sobre investigaciones de la peregrinación. Ahora mismo coordino la organización del VIII Congreso Internacional de Estudios Jacobeos, que se celebrará en Santiago el próximo mes.

¿Qué aspectos del Camino le atraen más como investigadora?

Me licencié en Historia del Arte, así que el lado artista y patrimonial, aunque también valoro el lado humano del Camino. La ruta jacobea es un mundo donde lo académico se mezcla con las relaciones y el trato con el peregrino, es un campo de intercambio que hay que valorar como un todo.

Usted se ha dedicado al estudio de figuras emblemáticas del Camino como Elías Valiñas o Diego Gelmírez, ¿a qué se debe?

Con estas iniciativas o con la creación de una revista de investigación lo que se intenta es difundir y predicar el entusiasmo que estas personas dedicaron a la ruta para que se fortalezca la existencia de un relevo entre los jóvenes, quienes en un futuro se encarguen de seguir el ejemplo de estos pioneros para que se mantenga la ruta.

¿Cuál es el potencial del Camino?

El cultural. El aspecto turístico está muy cuidado y es bueno que exista una comunicación para dar a conocer el Camino, pero los municipios deben valorar la importancia de la ruta como el bien más internacional de Galicia. No sólo hay que crear albergues y establecimientos, también debemos cuidar el aspecto cultural porque la riqueza histórica con la que cuenta la peregrinación es inmensa. Los ayuntamientos tienen que darse cuenta de que una buena oferta cultural puede generar otro tipo de interés, hablamos de caminantes que vengan a conocer la historia, tal vez dispuestos a quedarse varios días.

¿Cómo se podría explotar ese aspecto en Sarria?

Sarria es un punto muy importante dentro del Camino Francés y, además, con mucha historia que debe darse a conocer. Mi asignatura pendiente es reivindicar el valor para Sarria del monasterio de la Magdalena, un hospital para peregrinos fundado por unos monjes italianos que estaban realizando el Camino, y que se convirtió en el elemento de conexión sobre el que se fundó la villa.

¿Tiene otros proyectos en mente?

Ahora mismo me encuentro inmersa en los actuales, pero existe la idea de crear el año que viene una base de datos iconográficos del Camino, en la que se guardarán todas las imágenes de Santiago que existan. La idea es crear un corpus en imágenes que se comparta en la red.