Apostol

La casa del peregrino en la ciudad

19 septiembre 2010 / Mundicamino

El único centro de información a los caminantes que recorren la ruta Jacobea en A Coruña, ubicado en la travesía de Tabernas, atendió en lo que va de año a más de 2.000 visitantes.

El Año Santo ha aumentado el volumen de trabajo de los miembros de la Cofradía del Apóstol Santiago que gestionan el único centro de atención a peregrinos que existe en la ciudad. Más de 2.000 caminantes, de los cuales el 20% son extranjeros, han pasado por el local de la travesía de Tabernas para solicitar información sobre rutas y albergues o, simplemente, para sellar el documento que acredita los lugares que visitaron durante la peregrinación. El centro está abierto los martes y los jueves de 19.00 a 20.00 horas.

Repartir folletos informativos y mapas con las diferentes rutas, explicar las condiciones de los albergues y dar consejos sobre las precauciones que deben tomarse para evitar las temidas ampollas o las lesiones musculares son algunas de las funciones que desempeñan los miembros de la Cofradía del Apóstol Santiago que gestionan el único centro de información para peregrinos que existe en la ciudad.

Un total de 2.000 caminantes han pasado en lo que va de año por este local, ubicado en la travesía de Tabernas, en la zona de O Parrote y junto a la iglesia de Santiago. La mayoría de los que demandan información son peregrinos que desean recoger folletos con imágenes de los monumentos y parajes que merecen ser visitados o reclamar información acerca de los lugares en los que pueden pasar la noche. Tampoco faltan los que, temerosos de las repercusiones de las largas caminatas sobre su organismo, piden consejo sobre el número de kilómetros que resulta conveniente recorrer cada día o acerca de la ropa y productos higiénicos que no deben faltar en sus mochilas.

Los encargados de gestionar el centro y de atender a los peregrinos son algo más que simples ciudadanos de a pie. Todos han hecho el Camino de Santiago, algunos en más de una ocasión, y conocen a la perfección las diferentes rutas y las casas de acogida. Es por esto por lo que los miembros de la cofradía están capacitados para opinar sobre los cambios que ha sufrido el Camino desde que el centro de acogida de la ciudad comenzó a funcionar a principios de los 80.

Los cofrades no están solos, pues cuentan con la estrecha colaboración del padre Domingo, párroco de la iglesia de Santiago. La dificultad de este sacerdote para atender a todos los peregrinos que visitan el templo fue precisamente lo que motivó la apertura de un local dedicado específicamente a resolver las dudas de los visitantes que caminan hacia Santiago. «El centro lo gestionan los miembros de la Cofradía del Apóstol Santiago. Se encargan de dar folletos, información, libros y también son los que organizan los actos de la Fiesta del Apóstol. Cuando no están ellos, tengo que encargarme yo de darles las credenciales a los peregrinos», explica el padre Domingo, que ha atendido a cientos de caminantes en lo que va de año.

Los peregrinos que llegan en la ciudad pueden visitar el centro los martes y jueves de 19.00 a 20.00 horas. Este horario es especial para el Año Santo, pues en los años normales sólo está abierto los jueves. Cuando el local está cerrado, los caminantes pueden entrar en el templo de Santiago para conseguir las credenciales que demuestran que estuvieron en la ciudad durante su peregrinación.

Las estadísticas del centro permiten conocer la procedencia de los peregrinos que llegan a la ciudad, ya sea por recorrer el llamado Camino Inglés o por aprovechar para visitar A Coruña después de haber completado otra de las rutas. Los responsables de la Cofradía del Apóstol Santiago explican que el 80% de los caminantes son españoles. El 20% restante está conformado mayoritariamente por extranjeros que visitan la ciudad o el norte de Galicia y que, tras recibir información sobre la ruta Jacobea, deciden visitar Santiago o completar a pie alguno de los trayectos.

La Cofradía del Apóstol Santiago, a pesar de destacar la mejora de la señalización del camino en casi todas las localidades y de mencionar el incremento de peregrinos que completan el Camino Inglés, está un tanto descontenta con la actitud del Concello. Los responsables del centro de peregrinos -y también de casi todos los actos relacionados con el apóstol que acoge la ciudad- denuncian la escasa colaboración del Gobierno local a la hora de mejorar la ruta a su paso por la ciudad o de emprender campañas de promoción para atraer más peregrinos.

Uno de los últimos problemas entre los cofrades y el Concello estuvo relacionado con la ausencia de las tradicionales flechas amarillas que marcan la ruta hacia Santiago. Los miembros de la Cofradía del Apóstol Santiago solicitaron que el Gobierno local colocara señalización y, al comprobar que el Ayuntamiento no hacía caso de sus peticiones, acudieron ellos mismos a las vías y cruces de caminos para pintar sobre el suelo las marcas cuya función es evitar que los peregrinos se pierdan y caminen en vano.

Los peregrinos que acuden al centro de la travesía de Tabernas rara vez se marchan del local con las manos vacías. Para compensar la escasa información sobre el Camino Inglés que suministra el Gobierno local -siempre según la opinión de los cofrades-, los responsables del punto de atención a los caminantes entregan completos mapas en los que pueden verse las diferentes localidades y guías más extensas con datos e imágenes de los monumentos más destacados de cada municipio.

Una de las pocas actividades que los responsables del centro prefieren dejar en manos de otros es la atención médica. Los cofrades dan consejos pero prefieren que sean médicos los que curen las heridas.