El reciente cubrimiento de algunos estercoleros en el valle de Erro ha mantenido uno de Viscarret en su ubicación original, a unos 20 metros del Camino de Santiago. Peregrinos y algunos vecinos lo critican, y las autoridades se defienden.
Me parece terrible. Con la de terreno que hay por todas partes, no veo correcto que se haya instalado justo aquí». «No es un buen sitio, desde luego. En mis 42 días de marcha desde Le Puy (Francia), hasta pasar por aquí no he visto nada tan horrible e inapropiado. Cuando haga calor tiene que oler una barbaridad». Son dos opiniones recogidas este mes a pie de Camino de Santiago en el valle de Erro. En concreto, a la salida de Viscarret.
Sus autores son dos peregrinos, la argentina de 57 años María del Valle Sarasua, y el francés de 61 Jacques Quazzola, respectivamente. Y con sus palabras hacen alusión a un gran recinto cubierto que acoge un estercolero municipal en este punto y a apenas 20 metros de la ruta jacobea.
Se ubica a 500 m del pueblo en dirección a Lintzoain, y también junto a la carretera Nacional N-135 y el cementerio. Según recuerdan algunos vecinos de Viscarret críticos con esta ubicación, el estercolero siempre ha estado ahí, si bien consideran que debió ser trasladado lejos del Camino de Santiago cuando el Ayuntamiento del valle de Erro emprendió una campaña para cubrir los existentes.
«Era el momento, pero no se hizo, lo que ha llevado a que ahora este punto se vea más, ocupe más superficie (unos 1.200 m2), pueda acoger más estiércol y siga apestando ante el paso de peregrinos, sobre todo con calor y en días de bochorno. Todo el que pasa lo mira mal. No es de buen gusto, y menos en estos tiempos en los que lo que se debe hacer es cuidar esta ruta», apuntan.
Pantalla protectora
El estercolero de Viscarret se cubrió junto a los de Lintzoain, Esnotz, y parte de los de Erro y Espinal, el año pasado, con una inversión de 236.000 euros y con ayuda de la Unión Europea y el Gobierno foral a través del Plan de Desarrollo Rural de Navarra. Es una primera fase. En Viscarret había dos, y ahora ha quedado sólo éste.
«El proyecto viene desde hace 10 años, y se hizo mediante convenio con Medio Ambiente. La ubicación la elige cada concejo. La normativa medioambiental de la UE exige cubrirlos para evitar escorrentías y que el estiércol acabe en regatas con la lluvia», destaca el alcalde, Enrique Garralda.
«El proyecto tiene autorización ambiental y del Gobierno, y el estercolero siempre ha estado aquí. No obstante, vamos a solucionar el impacto visual colocando una pantalla vegetal entre el estercolero y el Camino de Santiago», añade.
El presidente del concejo de Viscarret, Patxi Zalba Ibarrola, señala que «era el único terreno accesible del que disponía el pueblo», y cree que «no molesta tanto y huele menos desde que se cubrió, porque además la lluvia no arrastra el estiércol». «Estamos en el campo, y es lo que hay. Parece que los ganaderos molestemos en todas partes, y qué raro que generalmente al que viene de fuera», sentencia.
