Apostol

Siete kilometros sin barreras

16 mayo 2011 / Mundicamino

La Asociación de Amigos del Camino de Miranda junto a 20 usuarios de Asayeme recorrieron la etapa que une Rivaguda con la ciudad • En la jornada buscaron demostrar que los enfermos mentales están integrados.

No fue una jornada más. Porque aunque para algunos se trataba de repetir la experiencia de 2010, para muchos fue la primera vez que sus pies les llevaban por una etapa del Camino de Santiago Vía de Bayona. Los 20 usuarios de Asayeme que ayer compartieron el trazado entre Rivaguda y la ciudad con la Asociación Amigos del Camino, consiguieron además de sus dos primeros sellos de peregrinos, demostrarle a la ciudadanía que las personas que sufren alguna enfermedad mental están integradas en Miranda.

Maricruz lleva años como peregrina y confiesa que ha disfrutado mucho de la jornada. «Deseábamos caminar juntos y dejarles que naveguen como se suele decir. Creo que lo más importante es que ponen todo su empeño y demuestran que son capaces», dice.

Para el coordinador de Asayeme, Sergio Bujo, además de lo bonito que es el Camino de Santiago en sí, «lo más importante es el hecho de realizar actividades junto a otras asociaciones. Queremos mostrarle a los mirandeses que estas personas pueden tener las mismas aficiones», señala.

El Camino y Asayeme tienen en común para Bujo, «esa cosa de recuperación y de rehabilitación de uno mismo y también requiere una exigencia física y ambas tienen que ver con nosotros», cuenta. La etapa, de unos 7 kilómetros, empezó en Rivagunda, cruzó Bayas y llegó hasta el parque Antonio Machado donde el escultor Santiago Amigo mostró sus árboles tallados.

Al final, además de aprender el sentido de las flechas amarillas y el significado de las vieiras, consiguieron su segundo sello de peregrinos en el Ayuntamiento