¿Quién dijo que había que esperar once años para repetir el efecto Xacobeo? En Caldas de Reis, al menos, no solo ha decaído la afluencia de peregrinos, sino que las cifras reflejan que a estas alturas del año ya han pasado muchos más que en 2010 por las mismas fechas. La situación, sin embargo, parece no verse aprovechada tanto como debería por el tejido hostelero y comercial de la villa, por la que diariamente -y más será durante el verano- pasan decenas de romeros de camino a Santiago de Compostela.
De ello da fe el responsable del único albergue que hay en Caldas, concretamente en el Campo da Torre, de titularidad privada después de que el Concello se desligase del proyecto y mientras la Xunta de Galicia no se decida a construir uno en el municipio, que es, además, fin de etapa en el Camino Portugués.
‘Temos máis afluencia que en 2010’, explica Jesús Fariña, impulsor de esta posada en la que, a pesar de no estar incluida en la red de albergues de la Xunta, los usuarios pagan cinco euros por pernoctar y se ajustan al mismo horario que en los demás situados a lo largo de la ruta. ‘En marzo do ano pasado non enchiamos nin a metada e este ano xa o temos ao cento por cento desde ese mes’.
En cuanto a las nacionalidades de los peregrinos, son, sobre todo, alemanes, seguidos de portugueses, italianos y franceses. ‘Galegos e españois son os menos. Por exemplo, se en xuño pernoctaron 996 persoas, penso que só eses seis foron os galegos’, calcula.
La mayoría de los peregrinos eligen en esta ocasión el Camino Portugués después de haber recorrido el Francés el año pasado, otros muchos repiten y después hay casos de quienes están recorriendo la ruta lusa al revés y concluirán su peregrinación en el santuario de Fátima.
Doce mil. Tal es la avalancha que los responsables del albergue se ven obligados en muchas ocasiones a derivar a los peregrinos a hoteles y pensiones, siempre que su capacidad económica lo permita. También mantienen contacto habitual con la directora del colegio religioso La Encarnación, a donde envían a los rupos de más de 15 o 20 personas cuando no hay espacio en la posada. ‘O outro día aínda derivamos a un grupo de 86 persoas e parece que xa teñen bastantes reservas de grupos’, explica Fariña.
Aunque de momento no hay cifras exactas sobre la afluencia del albergue, su responsable calcula que si el año pasado contabilizaron 8.421 peregrinos, ‘este chegaremos aos 12.000’. El albergue del Campo da Torre cuenta con 36 plazas en literas y también suelen habilitarse, si son necesarias, diez colchonetas. ‘Temos outras dez, pero habería problemas de espazo e comodidade, así que como moito poden pernoctar 46 persoas. De feito, abrimos á unha da tarde e ás dúas xa está cheo’, subraya.
Jesús Fariña señala que los peregrinos se quedan encantados con la villa (‘gústalles o pobo, din que é moi cómodo’) y con los precios de la hostelería, aunque en este caso, apunta, ‘botamos de menos que haxa algo de unión na hostalería. Esta xente gasta cartos no pobo e é unha pena que non haxa máis consenso’ para diseñar una estrategia que logre optimizar la recaudación de beneficios procedente del Camino de Santiago.
‘Os peregrinos pregúntannos e nós derivámolos a varios locais de por aquí e tamén lles facilitamos información sobre os balnearios. De feito, algúns quedan dous días en Caldas para descansar, pero desde o albergue animamos a comerciantes e hostaleiros a que nos pasen información sobre os seus locais para dárllela aos peregrinos, porque nos interesa ter canta máis sexa posible’. De hecho, apunta, apenas cuentan con el expositor de Caldas Centro Comercial Aberto con sus folletos publicitarios.
‘Penso que a xente non é consciente do que move o Camiño. Parece que non hai interese’, lamenta Fariña, quien pedirá una entrevista a la gerente de la Sociedade Anónima de Xestión do Plan Xacobeo, Camino Triguero, ‘para poder se podemos chegar a algún tipo de acordo, dado que as negociacións co Concello non foran nada fructíferas’.
