El proyecto de colaboración busca la promoción turística de la Ruta Jacobea a su paso por El Bierzo.
El Camino de Santiago no solo es una seña de identidad de buena parte de la comarca leonesa de El Bierzo, sino también el enlace con diferentes culturas. Así, en pleno Camino, prácticamente como puerta de entrada de la Ruta Jacobea en la comarca, Molinaseca se ha convertido en un puente con Oriente a través del hermanamiento con Ainancho, una localidad japonesa de 15.000 habitantes que forma parte de otra ruta, el Camino de los 88 Templos de Shikoku.
El fin último de esta relación bilateral surgida de la peregrinación a España del director de la NPO Shikoku Henro -la entidad que gestiona esta ruta nipona-, Hirohumi Matsuoka, es el de la promoción. El Camino de los 88 Templos quiere ser reconocido Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, al igual que lo es el que desemboca en Santiago, y, asimismo, pretende darse a conocer en el resto del mundo y ser también lugar de peregrinación a nivel internacional.
Los nipones buscan, en su colaboración con el Ayuntamiento leonés, dar un impulso definitivo a su particular senda espiritual. Una labor en la que ya participa de lleno el equipo de gobierno local de Molina. Así, hace semanas que la localidad alberga una exposición exclusiva sobre los 88 Templos de Shikoku. Allí, el peregrino de paso o el turista de estancia conocen de cerca el entorno y el significado de esta ruta, de 1.200 kilómetros de longitud.
Además, en la mente de todos está otra iniciativa similar, la de exponer las perlas que se cultivan en Ainancho y su zona limítrofe. El intercambio sirve también para extender la promoción de la Ruta Jacobea en Japón. De hecho, un equipo de la televisión nacional nipona trabaja ya en la elaboración de un documental que será emitido a principios de año.
Hirohumi Matsuoka fue el enlace entre Molinaseca y Japón, pero ahora las relaciones se han afianzado y el fin último no solo es cultural, sino también económico y social. Ainancho vive fundamentalmente de la pesca y la agricultura, por eso su alcalde, Shimizo, quiere conocer de cerca las técnicas que al respecto se emplean en El Bierzo, también zona agrícola y de pesca, para exportarlas a su zona y obtener mejores resultados. Shimizo visitó España hace días y aquí mantuvo un encuentro con el alcalde de Molinaseca, Alfonso Arias; la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, y el presidente de la Cámara de Comercio, Manuel Lamelas Viloria, quien ha apostado por abrir relaciones comerciales de inmediato y que igual que Molinaseca fue el puente de entrada en España del Camino de los 88 Templos, Ainancho sirva a la entrada de los productos leoneses en Japón. Shimizo llegó a El Bierzo acompañado de un maestro escultor experto en tallar árboles vivos. Ogita, que así se llama, regalará a Molina una de sus obras, tallada en uno de los árboles de la localidad.
Museo de las civilizaciones
La relación surgida de la similitud de dos rutas de peregrinación ha servido también de punto de partida para ahondar en la creación de un museo de las civilizaciones que albergue todos los caminos del planeta. Esta es la pretensión del Ayuntamiento de Molinaseca, que hace dos años inició los trámites para alcanzar tal ambición.
Ya tienen el compromiso de la Ruta de los 88 Templos y del Camino del Sol de Brasil. Varias rutas andaluzas han mostrado su interés, como la del mozárabe, y la idea ha llegado también hasta Noruega y Suecia, desde donde se han mostrado dispuestos a colaborar. Molinaseca ya no sería solo una de las puertas de entrada al Camino de Santiago, sino también un escaparate de las culturas y el acceso a todos los caminos del mundo.
La idea es construir un gran edificio cuya zona central se destinará a la Ruta Jacobea y a su alrededor se ubicarán el resto de los caminos. Los terrenos ya los tienen y también el compromiso del presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, de mantener una reunión para tratar el aspecto de la financiación.
