Apostol

Desde Australia para acoger al caminante

29 mayo 2016 / Mundicamino

Voluntarios de todo el mundo llegan a Santiago para acoger a peregrinos en la Oficina de Carretas. Quieren devolver a la Ruta todo lo que les ha transmitido.

Nuestros protagonistas de hoy tienen en común que son grandes amantes del Camino de Santiago. Todos vinieron a Santiago en varias ocasiones motivados por la peregrinación, pero su última visita tiene un significado muy especial. Vienen a devolverle a la Ruta todo lo que les ha aportado en sus experiencias como caminantes. Están sentados en la misma mesa de la Oficina de Atención al Peregrino de Carretas Margaret Tierney, Barbara Bacon, Juan Antonio Andrés y Jaume Alemany. Los tres primeros son voluntarios que han venido a Santiago para acoger a los cientos de personas que llegan a diario a la tumba del Apóstol; Jaume es un sacerdote mallorquino que lleva 25 años vinculado al Camino y que actualmente se encarga de la formación de los hospitaleros cristianos en el marco del programa de voluntariado que impulsa la Catedral.

“Estoy aquí por mi fe, porque quiero ayudar a todos los peregrinos que llegan a Santiago”, relata Barbara, una policía federal australiana jubilada que recorrió varios itinerarios jacobeos. “Mis hijos ya no viven en casa y tengo mucho tiempo libre. Por eso pude venir a colaborar en el voluntario”, explica en conversaciones con EL CORREO GALLEGO, antes de apuntar, desde su experiencia como experta en terrorismo, que el Camino de Santiago “es muy seguro” aunque “es necesario ir siempre con los ojos bien abiertos, sobre todo en las ciudades, ya sean grandes o pequeñas”.