Apostol

Siete de cada diez peregrinos del Camino de Santiago en mayo eran extranjeros

16 junio 2016 / Mundicamino

La ruta jacobea encara los meses más intensos con 4.862 «compostelas» más que el Xacobeo 2010.

Cualquiera que recorra alguna de las etapas del Camino de Santiago, en especial aquellas que preceden a la entrada de la ruta en Galicia, o que de un paseo alrededor del santuario del Apóstol no tardará en percibir que la peregrinación jacobea es un fenómeno internacional. La diversidad de lenguas que se escuchan en terrazas —o incluso en las propias misas en la Catedral— se refleja desde hace ya varios años en las estadísticas de caminantes que recogen su «compostela», el certificado de haber recorrido al menos 100 kilómetros a pie o 200 en bicicleta o a caballo.

Pero la distancia entre españoles y extranjeros no deja de aumentar, especialmente fuera del periodo estival. Durante el pasado mes de mayo se produjo una de las diferencias numéricas más representativas que se recuerdan: siete de cada diez peregrinos que culminaron el Camino eran foráneos. En concreto, solo el 28,62% (9.383 personas) eran nacionales. El 71,38% procedía del exterior. Es decir, que de los 32.782 peregrinos contabilizados, 23.999 eran de otros países.

Este incremento de extranjeros tiene varios responsables, aunque sobresale el caso de los alemanes. El 12,33% de los peregrinos (4.042) fueron germanos, muy por encima de los italianos y los estadounidenses, segundos y terceros en este ranking con 2.407 y 2.374 personas, respectivamente. La clasificación de nacionalidades la componen 115 estados diferentes. En las primeras posiciones se encuentran muchos de los habituales: Portugal, Francia, Irlanda, Reino Unido, Australia, Brasil, Holanda, Canadá, Corea del Sur, Polonia, Dinamarca y Argentina. Pero el fenómeno es tan amplio que llega a Taiwán, Islandia, Panamá, Namibia, Malasia, Suazilandia, Omán, Tuvalu, Islas Feroe, Palau, Eritrea, Samoa Occidental o Kazajistán.

A por el aluvión estival

Al margen del análisis circunscrito al último mes, el global de 2016 mantiene la tendencia iniciada en enero que apunta hacia un posible récord absoluto a finales de año. Hasta el pasado 31 de mayo habían atravesado el Camino 61.989 peregrinos, lo que suponen 4.862 más que los 57.127 de 2010, cuando tuvo lugar el último Xacobeo. Las previsiones de que la apertura de la Puerta Santa por el Jubileo de la Misericordia elevaría aún más la afluencia de fieles y turistas se confirma. La llegada de grupos de chavales a lo largo de los meses estivales, los preferidos por los españoles para adentrarse en la vía jacobea, podría apuntalar esta tendencia. Aún en el otoño podría dejarse notar, dado que el templo jacobino no cerrará su más insigne acceso hasta el 30 de noviembre.

Los datos facilitados desde la Catedral de Santiago —a través de la Oficina del Peregrino en la calle Carretas— indican, además, que el 52% de las credenciales entregadas fueron a hombres y el 48 a mujeres, y que el 91% había llegado a pie. Doce personas lo hicieron en silla de ruedas y 112 a caballo. En cuanto a las motivaciones, solo un 6,5% aseguró hacerlo por motivos ajenos a la fe. Por razones religiosas lo hizo el 44% y el 49,5 restante tenía motivaciones espirituales y de otro tipo. El 22% partió de Sarria, la localidad que marca el mínimo para obtener la «compostela» en el Camino Francés, y el 15,7% lo hizo desde el inicio de este en Saint-Jean-Pied-de-Port. Un 65% optó por este itinerario, mientras que el 19,5% eligió el Portugués. Los españoles más presentes fueron los madrileños.