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Savia nueva en el albergue de Villalcázar de Sirga

18 julio 2017 / Mundicamino

La nueva sala para discapacitados derriba barreras en el Camino de Santiago.

El boom del Camino de Santiago, que tuvo lugar a principios de la década de los noventa, provocó que se abriera una larguísima lista de locales a lo largo de la ruta para acoger a los peregrinos que cada año deciden, por la razón que sea, recorrer este itinerario cultural que comienza a los pies de los Pirineos y finaliza en la plaza del Obradoiro de la capital gallega. Por ello, es normal que en cada pueblo, por pequeño que sea, haya un albergue, una pensión o incluso un hostal.

Este es el caso de Villalcázar de Sirga, un municipio situado a 6 kilómetros de Carrión de los Condes y a 12 de Frómista. Solo cuenta con 172 vecinos –según los últimos datos del INE–, pero entre sus viviendas hay varios bares, una hospedería municipal, otra privada, dos hostales y otras tantas casas rurales, además del conocido Mesón de Villasirga.

El albergue público de esta localidad, que está ubicado en el edificio del consistorio, puede presumir de ser uno de los más tiempo lleva abierto en la zona: aproximadamente veinticinco años, según destacan desde la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Palencia. «Cuando este recorrido no tenía ni los caminantes ni el protagonismo actual, el Ayuntamiento, con su alcaldesa de entonces, María Natividad Marcilla, hizo posible que se abriese este local», explica el presidente de la institución projacobea, Ángel Luis Barreda Ferrer. Desde entonces, los hospitaleros fueron el expárroco de la villa, Ramiro Fernández, y voluntarios, procedentes de España y del extranjero, de la Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino.

Pero este año la situación ha cambiado. La Orden de Malta y el Ayuntamiento han aprobado un convenio que cede la gestión de la instalación al primer organismo durante quince años, según comenta el responsable del lugar, Álvaro Vázquez-Armero. Con este acuerdo llegó la rehabilitación del inmueble, que fue subvencionada por la Diputación. La obra, que concluyó en junio, sirvió para habilitar una sala para peregrinos con discapacidad. «La estancia está en la planta baja del edificio. Cuenta con un acceso especial desde la calle, un baño adaptado y una mesa auxiliar», indica el voluntario. El día de la inauguración, que tuvo lugar hace una semana, acudieron, junto al ministro Íñigo Méndez de Vigo (entre otras autoridades), los primeros cuatro romeros con sillas especiales.

Doce personas, 6 discapacitados y sus acompañantes, podrían utilizar este servicio por noche, aunque la oferta no se reduce únicamente a estas plazas. En la primera planta hay espacio para colocar un total de 20 camas más. Están distribuidas en tres habitaciones, quedando una de ellas reservada para los hospitaleros, que se turnan, por lo general, cada semana. Además cuenta con cocina y servicios.

Por la mañana, de 18:00 a 20:00 horas, ofrecen un desayuno en el que no faltan los amarguillos típicos, que dan energías a los peregrinos para que comiencen en buenas condiciones la etapa. La meta, lo más seguro es que esté en Calzadilla de la Cueza, Ledigos, San Nicolás del Real Camino o Sahagún, por poner algunos ejemplos. Todo dependerá si los peregrinos se acercan andando o en bicicleta a dar el abrazo a la estatua del apóstol Santiago que preside la capilla mayor de la seo compostelana.

Vázquez-Armero explicaque están teniendo especial cuidado en mantener una buena higiene para evitar posibles invasiones de insectos. «Pedimos que dejen las botas en el vestíbulo y les entregamos unas sábanas desechables y, si quieren, una toalla de un solo uso. Además indicamos que no tiren las mochilas al suelo», manifiesta este hospitalero, que, durante los primeros días de este mes ha sellado la credencial del peregrino a romeros estadounidenses, surcoreanos, húngaros y españoles.