Nada más salir de la localidad Burgalesa de Castrojeriz, los peregrinos se enfrentan a una subida breve pero de considerable desnivel, dicho ascenso se conoce como subida al Alto de Mostelares.
Preguntando a los peregrinos, a modo de encuesta, todos coinciden en que es fuerte y que incluso los que van en bici, muchos se bajan de la bicicleta y efectúan el ascenso a pie.
Sin embargo, cuando alcanzan la cima, todos afirman que ha valido la pena el esfuerzo, por las preciosas vistas que se aprecian.
El lugar invita a unos minutos de descanso, a un formidable recreo de la vista y, al tiempo, hacer algunas fotos para un recuerdo interesante e imborrable.