El Camino de Santiago es, sin duda, uno de los grandes valores turísticos de la provincia Burgalesa y su recorrido atrae con fuerza a peregrinos nacionales pero, especialmente, a extranjeros. Así las cosas, el pasado año 2017, 30.036 peregrinos- 16.745 hombres y 13.291 mujeres- pernoctaron en el albergue municipal ‘Casa de los Cubos’. De ellos, 5.991 eran de origen nacional y 24.045 de origen extranjero, lo que supone que ocho de cada diez peregrinos que hacen noche en la capital son de fuera de España. La cifra total de peregrinos es levemente más baja que la registrada un año antes, en 2016- un 1,8%- cuando hicieron noche 30.596 peregrinos- 24.000 extranjeros y 6.596 nacionales.
La caída es más importante echando la vista atrás. La asociación apunta que en el año 2010 llegaron al albergue 28.021 peregrinos, un 7,9% menos que el año pasado. Y es que desde hace años el Camino se ha convertido en un atractivo mundial que ha logrado hacerse un hueco fuera de las fronteras nacionales y goza de gran tirón en países como Francia, Alemania e Italia o a lugares más remotos como Corea del Sur o Estado Unidos.
Esta realidad ha supuesto una tendencia al alza de la llegada de peregrinos extranjeros, en detrimento de los nacionales. Echando la vista atrás, mientras que en el año 2010, el número de peregrinos nacionales era de 10.604, en el 2017, la cifra se redujo hasta los 5.991, lo que implica una caída del 43,5%. En el caso de los peregrinos extranjeros, en el año 2010 llegaron al albergue 17.417, mientras que en el último año esa cifra ha crecido un 38%, al llegar a los 24.045.
En cuanto a la procedencia, son los italianos quienes encabezan lalista de peregrinos extranjeros, con 4.171. En segundo lugar se sitúa Corea del Sur, con 2.924 peregrinos y ya en el continente europeo, Alemania, con 2.698 peregrinos se sitúa en tercer lugar y le sigue Francia, con 2.383. Saltando el Atlántico, los estadounidenses también mostraron un gran interés por el Camino de Santiago, con 2.104 peregrinos. Les siguen, aunque con gran diferencia, los brasileños, con 974.
En lo que se refiere al peregrinaje nacional, continúan siendo los catalanes quienes más pernoctan en el albergue, 1.687 en 2017. Les siguen, a gran distancia, peregrinos provenientes de la Comunidad Valenciana con 736; País Vasco, con 638; Madrid, con 561 y Andalucía, con 497.
Por meses, mayo y septiembre son los que cuentan con una mayor afluencia de peregrinos, con 4.464 y 4.291, respectivamente. Además, en 2017, otro de los meses que registró una mayor afluencia de peregrinos fue agosto, con 4.291 peregrinos. Aunque esos sean los tres meses con más movimiento, en el período comprendido entre abril y octubre, ningún mes desciende de las 2.900 pernoctaciones.
A tenor del medio utilizado para realizar el Camino de Santiago, el preferido por los peregrinos que pasan noche en el albergue municipal es a pie y es que 28.505 del total realizaron la ruta caminando. Le siguen los 1.531 que llegaron en bicicleta.
Ninguno de los peregrinos que hizo noche el albergue municipal ‘Casa de los Cubos’ realizó el Camino de Santiago a caballo o en burro. Por norma general, la presencia de estos animales es mínima y quienes deciden hacer la ruta Jacobea en este medio suelen elegir albergues ubicados en las diversas localidades de la provincia, donde pueden encontrar zonas de descanso para los animales.
El albergue municipal se nutre de las aportaciones de cinco euros por noche de pernoctación que abona cada peregrino. Así las cosas, el espacio recaudó el año pasado 150.180 euros. La instalación cuenta con una persona de atención y los hospitaleros, voluntarios de diferentes tramos del Camino que coordinan la gestión del albergue con una planificación semanal. El convenio de cesión de la gestión de las instalaciones permite al Ayuntamiento el mantenimiento del edificio a coste cero mientras que es la Asociación de Amigos del Camino de Santiago la que gestiona los fondos obtenidos por el pago de la entrada de los peregrinos.
Cada año, la recaudación se destina al mantenimiento de las instalaciones, que cuenta con 150 camas, y lo que sobra se dirige a realizar diversas mejoras en el propio albergue. De esta manera, en los últimos años, con la cantidad restante, la asociación ha afrontado el pago de suministros de la instalación, ha sustituido parte de las taquillas, ha cambiado las fundas de las camas e fundas de colchón y realizado mejoras en el edificio como el arreglo de los baños y el repintado de las paredes.
Al albergue municipal se suman dos más en la capital burgalesa, el de la Divina Pastora y la Casa de Peregrinos de Emaús en la parroquia San José Obrero. A los peregrinos que hacen noche en los albergues, hay que sumar aquellos que deciden pernoctar en hoteles, hostales y pensiones.
