La legendaria señal nacida en Galicia que ha guiado a miles de peregrinos se unifica a nivel nacional.
Habrá una cada dos kilómetros y en todos los cruces.
El Consejo Jacobeo se reunió ayer en el Palacio Conde Luna de León, donde se celebró un pleno para preparar la celebración del próximo Año Santo. Este encuentro ha servido para aprobar la creación de un grupo de trabajo para la coordinación de los preparativos de 2021, así como un documento con nuevas directrices de señalización de la Ruta Jacobea y la creación de otro grupo para avanzar en acciones relacionadas con el Camino Francés. En lo tocante a la señalización, el Consejo decidió convertir la flecha y la concha amarilla en los únicos símbolos oficiales del Camino de Santiago. Esta medida, tal y como explicó la consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, María Josefa García Cirac, permitirá a los peregrinos que realicen la Ruta identificar las señales oficiales, que serán iguales en todas las comunidades autónomas, lo que «permite mejorar la atención al peregrino».
Con este objetivo, se ha elaborado un documento de Directrices de Señalización que pretende evitar la diversidad gráfica y técnica de la señalética jacobea, mejorar la información al peregrino y armonizar las simbologías, aplicaciones y características técnicas de dicha señalización. Es en este documento en el que se establece que la flecha amarilla tiene un valor «incuestionable» como elemento indicador de dirección del Camino, por lo que se recomienda su utilización preferente. Asimismo, establecen que sería aconsejable la existencia de una flecha amarilla cada dos kilómetros y siempre una en cada cruce.
La concha también figura como un símbolo identificativo de la Ruta. Sin embargo, este emblema no se creó como indicador de dirección, por lo que el Consejo Jacobeo recomienda que el emblema de la concha se utilice como símbolo identificativo del Camino de Santiago y aconseja que su representación, proporciones y colores, así como su utilización, se ajusten al manual.
