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El Camino Portugués dispara la llegada de extranjeros a Baiona

13 junio 2018 / Mundicamino

La oficina de turismo registró un aumento del 50% de peregrinos respecto a 2017.

Cada vez son más lo peregrinos que eligen Baiona como punto de partida para recorrer el Camino Portugués por la Costa. Así lo corroboran los datos proporcionados por la oficina de turismo de la villa marinera a través de su alcalde Ángel Rodal, tras constatar un aumento de 355 caminantes que recalaron en las instalaciones municipales respecto a 2017. A día 1 de junio del pasado año la cifra se situaba en 710 mientras que en el mismo día de 2018 el número superó el millar, en concreto 1.065, lo que supuso un crecimiento del 50% procedentes en su mayoría de países como Alemania, Italia, Portugal, Irlanda y Estados Unidos. Tan solo el 19% de los visitantes fueron españoles.

La progresión que está teniendo el Camino Portugués por la Costa en cuanto al número de peregrinos anuales apuntan a que esta senda, alternativa a la tradicional, está ganando en adeptos y popularidad. Desde el Concello se marcaron el objetivo de convertirla en la segunda más elegida detrás del francés, el más popular de todas las opciones existentes.

Por el momento ya existen varias agencias de viajes, incluso extranjeras, que ofertan la ruta a Santiago de Compostela con punto de partida desde Baiona, compuesta por 123 kilómetros y seis tramos que discurren por villa marinera, Vigo, Redondela, Pontevedra, Caldas, Padrón y Santiago de Compostela. Muchas webs de viajes lo catalogan como el más bonito del trayecto por sus paisajes, aldeas y bosques, aunque en realidad se trata de un fragmento del camino completo. La totalidad del recorrido consta de 280 kilómetros, parte desde Oporto y se compone de un total de 13 etapas aunque para conseguir la Compostela tan solo es necesario completar 100 kilómetros del total.

Por otra parte Rodal recibió en la mañana de ayer un grupo de 40 peregrinos irlandeses, en concreto de la ciudad de Dublín, que recorrerán los 123 kilómetros a pie que separan la villa de la capital autonómica.

Los visitantes desembarcaron en Vigo procedentes de su ciudad natal y aprovecharon para conocer el municipio antes de partir.