Cientos de personas se agruparon ayer entorno a la Oficina de Atención al Peregrino de Ferrol alrededor de las diez de la mañana para comenzar el Camino Inglés. Se trataba de una excursión de la que formaban parte adultos y niños que llegarán a Santiago en los próximos días y que llamó la atención a todo aquel que paseaba por la zona de Curuxeiras, debido a la gran cantidad de personas que hacían cola para conseguir todos los detalles de su ruta. “De vez en cuando sí se ven grandes grupos, no nos sorprende tanto”, señalaron desde la oficina, al mismo tiempo que indicaron que es palpable el incremento de peregrinos que cada vez eligen más la ciudad naval como punto de partida del camino.
“Vienen por varios motivos, los que se inician lo prefieren porque es más corto que otros y luego están los que lo escogen porque está menos masificado y los que, al haber hecho ya muchas rutas, vienen a conocer esta”, explican.
El pasado mes de julio, de los 50.868 peregrinos que llegaron a Santiago, 2.742 lo hicieron desde Ferrol, lo que supone 806 personas más que en el mismo mes del pasado año (1.936) y casi un 2% más que en junio (1.561); “en el primer semestre del año crecimos en 1.000 peregrinos”, indican desde la oficina.
Cada vez más internacionales
Los extranjeros son los que más optan por el Camino Inglés, destacando los italianos –“con muchísima diferencia”, señalan–, seguidos de alemanes, británicos y estadounidenses. En cuanto a los nacionales, madrileños y andaluces son los más partidarios de esta ruta.
Entre las demandas que escuchan en la Oficina de Atención al Peregrino, la ausencia de alojamiento específico en la ciudad naval es lo más comentado. “El tema de que no haya un albergue es lo que más les preocupa, y la verdad es que es una pena que no exista. Muchos se quejan también de los horarios del de Pontedeume, pero por lo demás todo son buenas críticas, como la señalización”, explican desde la instalación ubicada en el puerto de Curuxeiras.
