Monseñor Barrio ofreció una conferencia en Estrasburgo en la que instó a construir un continente «abierto y acogedor».
El mensaje jacobeo resonó ayer en la Comisión Europea de la mano del arzobispo de Santiago. En una conferencia en Estrasburgo (Francia), monseñor Julián Barrio defendió que la peregrinación a Compostela «descubre que el cristianismo ha configurado una Europa abierta y, por lo tanto, puede integrar nuevos elementos». Y con esto, instó a construir un continente «abierto y acogedor, que continúe realizando en la actual globalización no sólo formas de cooperación económica, sino también sociales y culturales».
«El Camino de Santiago y el continente europeo forman un todo inseparable en el fondo de nuestra historia milenaria», sostuvo el prelado compostelano durante la ponencia en el Departamento de Cultura del Consejo de Europa, a la vez que apuntó que es «indudable que Europa nace y da sus primeros pasos en un Camino que conducía a Compostela».
Sobre el sentido antropológico del fenómeno jacobeo, monseñor Barrio explicó que «cuanto más rápido camina la humanidad, mayor es la necesidad de sentir cimientos sólidos. Parece que los lugares de peregrinación, y en particular el de Santiago de Compostela, responden a una profunda necesidad antropológica… El hombre no está completo hasta que se encuentra a sí mismo».
También quiso el prelado hacer referencia a las visitas del Juan Pablo II a Santiago y a sus exhortaciones al viejo continente.
