Correos, que en los últimos años ha apostado muy fuerte por el transporte de mochilas para los peregrinos, hace en su página web dedicada al Camino de Santiago (elcaminoconcorreos.com) una doble apuesta por Ponferrada como salida para quienes quieran hacer un recorrido express por la ruta milenaria. Por un lado, en bici, como punto de inicio para los aficionados a las dos ruedas que no tengan tiempo de hacer el recorrido completo, y, por otro lado, como alternativa por el llamado Camino de Invierno.
«El Camino de Santiago de Ponferrada a Santiago supone recorrer los últimos 200 kilómetros de una de las rutas milenarias más importantes de Europa. Desde la capital del Bierzo, en plena provincia de León, el peregrino atravesará hermosos bosques, montañas infinitas, pueblos de piedra con tejados de pizarra y lugares con una alta simbología jacobea. Hablamos de las nueve últimas etapas (cuatro si la peregrinación es en bicicleta) del Camino Francés, caracterizadas por la existencia de una abundante red de albergues y servicios, así como una adecuada señalización de los itinerarios. Ponferrada, motor económico y cultural del Bierzo, es el inicio de nuestro Camino de Santiago», dice la empresa pública en su promoción de Ponferrada. El recorrido sigue por Cacabelos y Villafranca hasta la subida a O Cebreiro.
Sin embargo, ese potencial del Bierzo en bicicleta no se refleja en los datos. La Compostela se entrega a todos aquellos que recorren en bici al menos 120 kilómetros, lo que coincide casi con el inicio del trayecto en Galicia.
En su promoción de las distintas rutas, Correos también promociona el Camino de Invierno. De Ponferrada a Santiago de Compostela en 10 etapas. 263 kilómetros, enlazando las dos últimas etapas con el Camino Sanabrés. «Una ruta hermosa, llena de naturaleza y paisajes atractivos, que evita las cumbres de O Cebreiro, duras y casi impracticables durante los meses de invierno», explica Correos.
«Además de la comarca del Bierzo, es el único Camino de Santiago que pasa por las cuatro provincias gallegas, entrando en Ourense por Valdeorras, pasando al sur de Lugo y de ahí pasando a Pontevedra y A Coruña. El terreno que cruza es su mejor baluarte: caminar por las famosas Médulas, serpentear los Cañones del Sil o subir al Alto do Faro son experiencias únicas para el peregrino».
