El Camino de Santiago cerró el año 2016 con 278.224 peregrinos. Fueron 5.400 más que el Año Santo de 2010. La ruta xacobea está de moda. Sobre todo entre los extranjeros. El 45% de los peregrinos eran españoles, mientras que 55% tenía otra nacionalidad. Italia, Alemania y EEUU copan las tres primeras procedencias de viajeros de otros países. Entre los tres suman el 40% del total, pero hay una nacionalidad que destaca sobre el resto: la coreana, que desde hace doce años no ha parado de aumentar. En 2004 solo cuatro coreanos llegaron a abrazar al Apóstol. En 2009 pasaron del millar. En 2015 superaron los 4.000 y en 2016 fueron 4.535, el 2,95% del total y la novena nacionalidad que más peregrinos aportó al Camino.
La causa de este fervor por la ruta gallega de los coreanos, sobre todo si se tiene en cuenta que la mayoría de la población de este país es budista, se debe a la escritora Kim Hyo Sun.
En 2007, escribió el primero de sus tres libros sobre la ruta xacobea. La trilogía se ha convertido en superventas en Corea.
Todo empezó con el primero que publicó sobre su experiencia tras realizar el Camino hasta la tumba del Apóstol. El libro fue un éxito y animó a muchas compatriotas a probar la experiencia. Algunos de ellos escribieron también su libro. El resultado es más de una docena de publicaciones en coreano sobre el Camino de Santiago, y un número creciente de turistas de este país que quieren peregrinar a Compostela, con o sin motivaciones religiosas.
Gracias Kim Hyo Sun, el Camino de Santiago es un fenómeno de masas en Corea.