Apostol

Camino Francés

Etapa

34

Monumentos

Monte do Gozo

Santiago de Compostela

Catedral

El máximo exponente de Santiago es su catedral, cuya construcción se inició a partir del momento en que se produjo el descubrimiento de la Tumba. Aun cuando se conserva la Capilla del Salvador de influencia prerrománica, es un templo esencialmente románico con planta de cruz latina, al que posteriormente se añadieron elementos barrocos de carácter decorativo. Cabe destacar el Pórtico de la Gloria, que constituye un conjunto escultórico iconográfico románico, de una gran belleza. Su fachada principal da a la excepcional Plaza del Obradoiro (obra de Oro), corazón y referencia de la Ciudad y en cuyo lugar también se encuentra el Hospital real, mandado construir por los Reyes Católicos en el año 1492 (hoy Parador Nacional).Web Catedral de Santiago

Plazas

La Plaza de la Quintana, donde una gran escalinata divide la «Quintana de Muertos», abajo, de la «Quintana de Vivos», arriba. A ella dan el Pórtico Real, donde se sitúa la popular «Berenguela» o Torre del Reloj, y la Puerta del Perdón que sólo se abre en los Años Santos. La Plaza de las Platerías, llamada así por los numerosos comercios de plateros que existen bajo las arcadas del claustro de la Catedral, con su fuente de Caballos en el centro. La Plaza de la Azabachería, que debe su nombre al gremio de los azabacheros. En este lugar se hallaba la primitiva puerta románica, llamada Puerta del Paraíso, lugar por donde entraban los peregrinos, desprendiéndose de sus ropas a los pies de la «Cruz d’os Farrapos», que tomaría su nombre de los harapos que allí dejaran los peregrinos.

Monasterios

El Monasterio de San Pelayo, con su inmensa fachada, que fue fundado por Alfonso II para custodiar la tumba del Apóstol, siendo, por tanto, uno de los más antiguos de la ciudad. El Monasterio de san Martín Pinario, uno de los más monumentales de Santiago, cuya procedencia se debe al oratorio que en el año 912 el obispo Sisnado dedicó a San Martín.

Convento de San Francisco

Este convento rememora la peregrinación de Santo de Asís a Compostela en los años 1213-1215. Según la leyenda San Francisco recibió una revelación divina por la que se le encargaba que erigiera un monasterio en «Val de Dios», terreno que pertenecía al Monasterio de San Martín Pinario. El citado monasterio cedió el terreno a cambio de la entrega anual de un cestillo de peces, (solemne ceremonia que perduró hasta finales del siglo XVIII, en que los monjes de San Francisco entregaban el citado tributo a los de San Martín). La financiación de tal proyecto debía hacerse con un tesoro que sería hallado por Cotolay en una fuente. Y así sucedió, Cotolay encontró el tesoro, levantándose un edificio gótico del que hoy sólo quedan cinco arcos en el patio de la sala capitular. El convento actual y sus dos claustros son del s. XVII y la Iglesia del XVIII. Actualmente el monasterio alberga un interesantísimo Museo

Palacios

Los palacios de Galmírez y Rajoy, este último alberga en la actualidad la Presidencia de la Xunta de Galicia y el Ayuntamiento Compostelano. Los colegios de san Jerónimo y Fonseca, ambos fundados por el Rey Alfonso III en el siglo XV. Las casas del Cabildo y de los Canónigos.

Pórtico del colegio de San Jerónimo

Bellísimo pórtico románico que da acceso al colegio de San Jerónimo.

Expectación ante el vuelo del Botafumeiro.

En la Catedral de Santiago, uno de los momentos más esperados por los peregrinos, turistas, fieles o visitantes, es el vuelo del Botafumeiro.

Bien dirigido por cuatro o cinco fornidos botabuleiros, vuela por los brazos de la Cruz Latina que dibuja la propia Catedral, al tiempo que desprende las mejores esencias del incienso.

Si vas a Santiago de Compostela, no te lo pierdas.