Apostol

Vía Francígena

Etapa

1

Monumentos

Roma

Arco de Constantino

El Arco del Triunfo de Constantino rememora la victoria de Constantino I en la batalla del Puente Milvio en el año 312, que supuso el fin de la Guerra Civil de Roma contra Majencio. La estructura de 26 metros de ancho y 21 metros de alto se alza justo al lado de El Coliseo.

Su estado de conservación es fabuloso y muestra relieves de la época de Marco Aurelio, Trajano y Adriano, todos ellos extraídos de otros monumentos existentes, como el Foro de Trajano o el Foro Romano.

La inscripción que se puede ver en la parte superior del Arco de Constantino dice lo siguiente:

Al Emperador César Flavio Constantino, el más grande, pío y bendito Augusto: porque él, inspirado por la divinidad, y por la grandeza de su mente, ha liberado el estado del tirano y de todos sus seguidores al mismo tiempo, con su ejército y sólo por la fuerza de las armas, el Senado y el Pueblo de Roma le han dedicado este arco, decorado con triunfos.

El Foro Romano

Este foro es el más importante de todos los que se conservan actualmente en Roma y se encuentra en la zona comprendida entre Piazza Venezia y El Coliseo.

Era el lugar donde los romanos se reunían para tratar temas políticos, sociales, económicos, judiciales o deportivos entre otras muchas diligencias del Imperio. Por lo tanto se puede considerar este lugar la zona central en donde se desarrolló la antigua Roma.

El Foro de César fue el primero de los foros imperiales. Julio César ordenó y financió su construcción debido a que el Foro Romano se quedaba demasiado pequeño por el gran incremento de población y era insuficiente para las necesidades de aquella época.

Foro de Augusto fue el segundo Foro Imperial construido por el primer emperador de Roma, César Augusto. Se creó con motivo de honrar al Dios de la guerra «Marte» y para tratar temas legales

Foro de Nerva, Tito Flavio Domiciano decidió construir este foro con la intención de unir los foros de Cesar y Augusto y el Templo de la Paz

Monumento a Víctor Manuel II

Este enorme monumento de mármol blanco que se ubica entre la Colina Capitolina y la Piazza Venecia fue construido en homenaje al primer rey de la Italia unificada Vittorio Emmanuelle II. La construcción comenzó en 1885 mediante los diseños del arquitecto italiano Giuseppe Sacconi. Para la edificación se tuvo que arrasar parte de la Colina Capitalina, destruyendo consigo ruinas romanas y medievales.

En 1911, en el 50 aniversario del Nuevo Reino, fue inaugurado este símbolo de la unidad italiana.

El monumento cuenta con una gran escalera que conduce al llamado Altar de la Nación, dominado por una gran estatua ecuestre de Víctor Manuel II de 12 metros de alto. Próxima a la estatua está la Tumba del Soldado Desconocido con una llama eterna construida después de la Segunda Guerra Mundial.

En cada uno de los dos extremos de la parte superior se pueden ver las estatuas de la Diosa Victoria Alada sobre una cuadriga.

Castillo de Sant'Angelo

El castillo Castel Sant’ Angelo está situado en la orilla derecha del río Tiber, muy cerca del puente de Sant’Angelo, casi a la entrada del Vaticano. Este castillo destinado inicialmente a ser el mausoleo del emperador Adriano y su familia, comenzó a construirse en el año 135 por ordenanza de Adriano y fue finalizado en el año 139 por el emperador Antonino Pío.

Entre los años 270 y 275, durante la construcción del Muro de Aureliano, el mausoleo se fortificó y se unió a este muro, que rodeaba la ciudad de Roma defendiéndola de las invasiones bárbaras. A partir de este momento el edificio fue convirtiéndose poco a poco en una fortaleza hasta que siglos más tarde el papado lo adquirió para utilizarlo de refugio ante los posibles peligros. Un pasadizo secreto (actualmente sigue existiendo) comunica el Castillo de Sant’Angelo con el Vaticano.

El recinto consta de una plaza de 89 metros de diámetro, en la cual se levanta la torre de 64 m de diámetro. En la parte superior de la fortaleza se puede admirar una estatua en bronce de un ángel, obra del escultor Pieter Verschaffelt. La estatua representa el ángel que según cuanta la leyenda apareció en la parte superior de la fortaleza en el año 590 y que milagrosamente terminó con la plaga que había infestado la ciudad de Roma. Después de este acontecimiento el edificio pasó a llamarse Castillo de Sant’Angelo.

En el año 1925 paso a ser el Museo Nazionale di Castillo de Sant’Angelo. Actualmente se puede acceder 5 de sus pisos en los que se pueden ver, entre otras muchas cosas, los almacenes de grano, las dependencias papales, las celdas donde se conservan los restos de los sucesores de Adriano y una exposición de armas. En la terraza se logra disfrutar de unas maravillosas vistas de toda la ciudad.

El Coliseo

El Coliseo Romano, inicialmente llamado Anfiteatro Flavio, fue el edificio más grande jamás construido de la época y nombrado patrimonio de la humanidad en 1980 por la UNESCO junto con el centro histórico de Roma. Su construcción se inició bajo el mandato del emperador Vespasiano, concretamente entre el año 70 d.C y el 72 d.C, finalizándose en el año 80 d.C por su hijo, el emperador Tito.

Este gran anfiteatro daba cabida a numerosos espectáculos, como peleas entre gladiadores, animales y ejecuciones sangrientas de prisioneros a mano de bestias.

Esta magnifica edificación, símbolo del poder del Imperio Romano, posee unas dimensiones considerables. Su estructura ovalada tiene un perímetro de 524 metros con una dimensión de 189 metros de largo y 156 metros de ancho y alcanza una altura de más de 48 metros.

Plaza Navona

La Plaza Navona se sitúa en centro histórico de Roma al oeste del Panteón. Es una de las plazas más importantes y transitadas y siempre está repleta de gente que disfruta de un paseo, de las terrazas de los bares o de las fuentes que la decoran. Está construída sobre el antiguo estadio Domiciano que data del año 86 a.C, de ahí su gran forma ovalada.

En el siglo 15 el estadio se allanó para crear la Plaza Navona, aunque todavía quedan restos visibles alrededor de la zona.

La atracción principal de esta plaza son las tres fuentes que alegran la vista a los viandantes:

La Fuente de Los Cuatro Ríos

La Fuente de Neptuno

La Fuente del Moro

Otras de las atracciones de esta histórica plaza es Iglesia de Santa Inés en Agonía justo al lado de La Fuente de los Cuatro Ríos. Fue encargada en el año 1652 por el Papa Inocencio X y construida en el sitio en el que según la leyenda, Santa Inés fue obligada a desnudarse y milagrosamente le creció el cabello hasta tapar su desnudez.

La estructura de la iglesia fue obra de Girolamo y Carlo Rainaldi pero un año más tarde Barromini por orden del Papa derribó la fachada principal e hizo una nueva. La decoración interior es creación de Bernini

Basilica de San Pedro

Los inicios de la Basílica de San Pedro tuvieron lugar en el año 324, cuando Constantino ordenó erigir una basílica en el lugar donde fue martirizado y enterrado San Pedro, muy cerca del circo de Nerón. Tras el paso de los años la basílica inicial se fue deteriorando hasta que en el siglo XV fue demolida por temor a su derrumbe.

La basílica que podemos ver en la actualidad se comenzó a levantar el 18 de Abril de 1506 durante el papado de Julio II. Más de un siglo se tardó en construir, hasta que finalmente se terminó y consagró en el año 1626 bajo el pontificado de Urbano VIII.

Muchos fueron los arquitectos y artistas que participaron a lo largo de este proyecto, el cual fue inicialmente encargado al arquitecto Bramante, quien fue sucedido por Rafael. Después, le siguieron Antonio da Sangallo el Viejo, Miguel Ángel, Giacomo Della Porta y Domenico Fontana. Finalmente fue rematada por Carlo Maderno.

El Santuario de San Pedro tiene unas dimensiones de alrededor de 190 metros de largo, 58 de ancho y 136 metros de altura hasta la cruz de la bóveda. Aquí se hallan las tumbas de San Pedro y de la mayoría de los pontífices de la historia. Dentro del recinto se pueden ver esculturas como «La Piedad» de Miguel Ángel o creaciones tales como «La Cátedra» y el Baldaquino de San Pedro» obra de Bernini.

Plaza España

La Plaza de España es una de las plazas más importantes de Roma. Es el lugar preferido por turistas y romanos para pasar el día paseando o de compras, ya que las calles cercanas a la plaza están abarrotadas de tiendas y restaurantes.

Lo que más destaca es la gran escalinata de 135 peldaños que une la embajada de España con la Iglesia de Trinità dei Monti desde 1725. Durante primavera y verano el tramo de escaleras es decorada con numerosas flores de todo tipo.

Al pie de la escalinata se encuentra la Fontana della Barcaccia, encargada a Bernini por el Papa Urbano VIII. El diseño, un pequeño barco, se inspiró en un barco que se dice que tras la inundación del Rio Tiber, se quedó varado aquí después de que el agua disminuyó.

Siempre está rodeada de turistas observando la preciosa fuente de cristalinas aguas.

En la parte superior se alza la Iglesia gótica-renacentista de Trinità dei Monti, iniciada en el año 1502 por encargo del Rey francés Luis XII. En frente se puede ver un obelisco grabado con los mismos jeroglíficos que el obelisco de la Plaza de Popolo.

La Fontana de Trevi

La Fontana de Trevi, es uno de los monumentos más representativos de esta antigua ciudad. Los romanos tenían la costumbre de construir fuentes al final de los acueductos y la Fontana de Trevi es el punto final del acueducto Aqua Virgo construido en el año 19 a.C.

La fuente actual es una obra del arquitecto Nicola Salvi (elegido por el papa Clemente XII) quien aprovecharía el diseño del proyecto inicial de Bernini antes de que este lo abandonara tras la muerte del papa Urbano VIII, quien le había encargado el trabajo. Finalmente la construcción empezó en el año 1732 y terminó en 1762 por Giuseppe Pannini ya que Salvi murió en 1751 dejando su obra inconclusa.

Pannini sustituyó algunos aspectos del monumento y añadió las esculturas de Agripa y Trivia.

Presidiendo la fuente se puede ver la escultura de Neptuno en su carro con forma de concha, tirado por dos caballos marinos que a su vez son domados por dos tritones. Un caballo está tranquilo y obediente mientras el otro está inquieto, lo que representa el estado tranquilo y bravo del mar.

En los flancos de la fuente se pueden ver dos estatuas, cada una con un significado. La de la izquierda representa la abundancia y la de la derecha simboliza salubridad.

El Panteón

El Panteón de Agripa es un templo construido a los inicios del Imperio Romano con la finalidad de honrar a los Dioses.

El templo original fue levantado por Marco Agripa en el año 27 adC pero posteriormente tras los incendios y los destrozos que sufrió, fue reconstruido completamente por el emperador Adriano entre los años 123 y 125.

Se dice que el creador de este fastuoso monumento fue el arquitecto Apolodoro de Damasco pero no es del todo seguro. En el año 609 el emperador bizantino Flavio Nicéforo Focas Augusto donó el edificio al papa Bonifacio IV que lo transformó en iglesia y sigue así actualmente.

Es la construcción de la antigua Roma que mejor se conserva y lo más llamativo de este colosal monumento es su pórtico con sus ocho inmensas columnas y su gran cúpula de 44 metros de diámetro.

La Storta