La tradicional apertura de la Puerta Santa se realizó con poca afluencia, al limitarse el número de asistentes a 70 personas en la interior y 270 en el exterior del templo compostelano. Ni la lluvia logró restarle emoción a la puesta en marcha de este Xacobeo.
Por motivos de las sucesivas obras han ocasionado la imposibilidad del derrumbe del muro y que en este caso se realizó con una llave de plata por parte del arzobispo Julián Barrio.
El arzobispo de Santiago señaló que este Año Jubilar sea un año de gracia para todos los peregrinos que visiten en nuestro año Santiago de Compostela. La apertura de la Puerta Santa se inicio cuando las campanas de la Berenguela marcaban las 5 de la tarde.
La pandemia obligó a ajustar la ceremonia hasta el punto de que a la eucaristía solo asistieron unas decenas de personas.
La celebración tuvo como finalización la actuación, en la Praza da Quintana del gaitero Carlos Núñez.
