Apostol

Camino de Invierno

Etapa

5

Cultura

Monforte de Lemos

Delante del convento un cruceiro, situado a la salida de la villa, y donde se observa la huella jacobea con cuatro veneras talladas en el capitel.
En el centro de la zona arbolada del Campo de San Antonio, se levanta un cruceiro, restos del convento franciscano de San Antonio de Padua, fundado por don Rodrigo Enríquez de Castro, en 1503 y que continuaría el Cardenal Rodrigo de Castro. Con la ley de desamortización de Mendizábal, los monjes sufren la exclaustración que traerá consigo la ruina y posterior demolición del edificio.

A Vide

Moreda

A Broza

Reguengo

Piñeiro

Virís

Barxa

Fión

Vilaravide

Vilatiñosa

Cirdeiro

Vendanova

La Iglesia románica de San Pelagio de Diomondi fue un monasterio dúplice, según consta en documentos con fecha desde 954 referentes a donaciones, que indistintamente aluden a monjas y frailes. Mientras que las escrituras entre los siglos X al XIII reflejan que fue el monasterio de las tierras de Lemos que más prerrogativas disfrutó. Estuvo muy unido a la casa episcopal de Lugo desde los tiempos de Odario, utilizándolo los obispos como residencia de verano, luego usado como casa rectoral, conserva fragmentos de varias épocas. Fue declarado monumento nacional en 1931. En 1164 ya tiene como patrón a San Pelayo.
La iglesia es un magnífico ejemplar del románico compostelano. En la parte norte está adosado el edificio conventual. La fachada principal de gran riqueza, presenta a los lados unos arcos ciegos que parecen indicar la existencia de tres naves en el interior, lo que no acontece. La puerta principal abocinada, presenta cuatro arquivoltas de toro, sobre fustes lisos de mármol del país, con capiteles historiados. El tímpano es liso y en su parte interior se lee: ERA CCVIII HOC LIMEN SITVM EST. Indicando que este dintel se colocó en 1170.

Outeiro

Montecelo

Belesar

Cultura

Ponte Hermida

Líncora

Chantada

La villa chantadina. Casco histórico y paseo de la Alameda. Una de las referencias documentales más antiguas sobre estas tierras de Chantada, data de 1208 por parte del rey Alfonso IX, con una donación al monasterio de San Salvador o Convento.
Chantada fue creciendo por encontrarse en un punto donde confluían varios caminos. Fue convirtiéndose en un importante lugar de la ruta que venía por Valdeorras a Santiago. Las ferias aparecen, al menos, desde Fernando III y sus pesos y medidas se extendían hasta las tierras de Pantón. La villa de Chantada carece de monumentos antiguos destacables. Si bien su municipio está salpicado de numerosas iglesias románicas.