Benavente
San Juan del Mercado
La Iglesia de San Juan de Mercado presenta un estilo románico, la planta de la iglesia esta formada por tres naves con un crucero. La cabecera de la misma, es la típica románica con tres ábsides semicirculares, pero con un una decoración de jaqueado en las impostas.
El templo tiene tres portadas, todas ellas del más puro estilo románico. Destaca por el amplio desarrollo iconográfico la situada al mediodía, recogida bajo un arco apuntado. El tema central que soporta el tímpano es el de la Adoración de los Reyes Magos. En el centro aparece la Virgen con el Niño sosteniéndolo en sus brazos, y a su izquierda están los tres Reyes Magos en actitud de presentar sus ofrendas. En el centro de la primera arquivolta aparece la Estrella de Belén, también puede reconocerse a los Magos ante Herodes, ante quien hace guardia un militar con la espada en alto, con un largo escudo y vestido con una malla típica de la época medieval.
En el interior de la iglesia podemos admirar restos de pinturas y frescos destacando un fresco que representa la escena de la Virgen con su hijo muerto en sus brazos junto a la cruz.
Hospital de la Piedad
Fue mandado construir por el quinto Conde de Benavente, D. Alfonso Pimentel y su esposa Doña Ana Herrera de Velasco en el siglo XVI, para acoger a los peregrinos que desde el sur de la península se dirigían a Santiago de Compostela. Su fachada es una hermosa muestra del primer Renacimiento, aunque mantiene aún influencias del estilo Gótico, con un arco de medio punto, encuadrado por un alfiz con gran decoración vegetal sobre el cual se puede observar un alto relieve de la Piedad flanqueado por dos blasones de los fundadores y rematado por un frontispicio con la venera jacobea.
En el interior se encuentra un patio rodeado de galerías, que da acceso a la capilla del Hospital, de decoración análoga a la de Santa María de Azogue.
Santa María del Azogue
Esta considerado como el principal monumento artístico de la ciudad de Benavente. Data de los siglos XII y XIII. El inicio de las obras de construcción se atribuyen a la época en la cual reinaba en la ciudad por Fernando II, pero la obras se vieron interrumpidas hasta finales del siglo XIII.
La planta general y la cabecera son claramente de estílo románico, aunque las bovedas de las naves laterales al ser de un periodo posterior XVI, son de diferente estílo arquitectonico.
Las bóvedas de las capillas externas son de cañón, mientras que las otras tres son de ojiva. Los pilares se hayan decorados con motivos geométricos y en zig-zag. Las bóvedas de las naves laterales responden a un periodo posterior y datan probablemente del siglo XVI.
Existen en la iglesia tres fachadas. La que está orientada hacia el sur tiene por tema central el «Agnus Dei», o cordero místico rodeado de cuatro ángeles incensando.
El nombre de Azogue deriva de un vocablo árabe que significa mercado, el cual tenía lugar en sus proximidades durante la Edad Media.
Torre del Castillo (Torre del Caracol)
La Torre del Caracol, obra del siglo XVI, es un bello edificio de 17 metros de cuadro, su estilo artístico es una mezcla entre gótico y renacentista. En sus dos fachadas presenta miradores de arcos escarzados, con cubos voladizos en los ángulos. En su fachada sur se pueden ver aún algunos escudos de la casa de los Pimenteles. Alberga en su interior un bellísimo artesonado morisco que procede del antiguo convento franciscano de la vecina localidad de San Román del Valle.
No obstante la Torre del Caracol, nombre con el que se conoce en la actualidad, sólo es una ínfima parte de todo el conjunto fortificado, compuesto por tres recintos amurallados que en sus épocas de esplendor se podía admirar.
Villabrázaro
Iglesia Parroquial de la Magdalena
Maire de Castroponce
Puente de la Vizana
El actual puente nos indica un posible origen romano y una factura medieval; se reconstruyó a finales del XVI, aunque en diciembre de 1808 fue volado por los ingleses para impedir el paso de Napoleón durante la Guerra de la Independencia. El arco central, destrozado durante dicha contienda, no fue reconstruido hasta pasado más de un siglo, en 1917. Este destrozo del viejo paso del Órbigo fue clave para que la moderna carretera terminase por cruzar el río bastante más al norte, dejando a un lado, los lugares por los que antiguamente pasaba la Ruta de la Plata.
Cuando se reconstruyó el puente, en el primer tercio del pasado siglo XX, se tuvo muy poco acierto al reconstruir el ojo central, rompiendo la belleza y armonía de la estructura medieval, actualmente el error es aún más grave al decidir la construcción de un puente nuevo absolutamente funcional en el que se ha prescindido por completo del criterio de belleza, tan presente en nuestros antepasados que sabían conjugarlo perfectamente con la funcionalidad.
Iglesia Parroquial de Santa Maria
La planta general y la cabecera responden al estilo románico. Tiene cinco bellos ábsides semicirculares con dos portadas, también románicas en el crucero. A finales del siglo XIII, durante el reinado de Sancho IV se concluyó y cubrió el crucero, y se levantó la torre.
Los arcos utilizados son apuntados en los ventanales y en gran parte de las bóvedas.
En los motivos de la decoración y en la distribución de los ábsides y pilares se observa una clara influencia del estilo cisterciense.
Alija del Infantado
Iglesia de San Esteban
Iglesia Parroquial de San Verdísimo.-
Su aspecto exterior es románico; Presenta sólidos contrafuertes laterales El pórtico es renacentista del S. XVI; guarda un precioso retablo de estilo barroco que posee varias imágenes policromadas. Las primeras referencias de esta iglesia aparecen ya en el año 1170. En la actualidad es la iglesia parroquial de la localidad.
Otros monumentos
Plaza y Castillo del Infantado
Se trata de una plaza amplia y aportalada, en la que la iglesia y castillo aportan castiza sobriedad.
El Castillo-Palacio de Alija del Infantado es una construcción perteneciente al linaje del Infantado que data de la segunda mitad del siglo XV o principios del XVI . Es de planta cuadrada, flanqueado por dos espacios cúbicos y en la muralla se elevan dos pequeñas torres. Dentro del recinto se encuentra el Palacio privado de los Ponces, cuya construcción primitiva se remonta al siglo XIII.
Esta vasta edificación, poderosamente amurallada y de gran simetría que contó con trece torres, ha constituido un importante signo de identidad de la villa de Alija del Infantado.
Actualmente se encuentra restaurado y consolidado, y es de visita libre.