Apostol

Un Camino libre de delincuencia

03 mayo 2017 / Mundicamino

Más de 300.000 personas recorrieron en 2016 esta milenaria ruta. La mitad de ellos son extranjeros, que valoran la seguridad de un camino en el que pese a la afluencia de público solo se registraron 45 infracciones.

El pasado año, unos 300.000 peregrinos recorrieron algunas de las rutas del Camino de Santiago que desembocan ante los pies del Apóstol. Pero esta intensa actividad, que se prolonga a lo largo de todo el año y cruza buena parte de la geografía española, no se traduce en un aumento de los índices de delincuencia. Todo lo contrario. Según las estadísticas del pasado año, en la Comunidad gallega se detectaron 45 infracciones penales, la mayoría de ellas de carácter leve. Quienes han acometido esta aventura milenaria alaban la tranquilidad de los entornos y la hospitalidad de los vecinos de los pueblos que cruza el Camino y sus testimonios —a través del boca a boca o de las redes— que ayudaron a desviar la vista de casos puntuales como el de la peregrina Denise Pika Thiem, que fue asesinada en abril de 2015 a su paso por Astorga. Este fatal suceso, cuyo autor ha sido condenado recientemente, perturbó durante un tiempo una placidez que la Ruta Xacobea ha sabido recobrar haciendo gala de su esencia y sus raíces.

Según fuentes de la delegación del Gobierno en Galicia confirmaron esta misma semana, el nivel de actos delictivos en las inmediaciones del Camino es «prácticamente nulo». Y para blindar esta protección que acompaña a los caminantes durante todo su periplo esta Semana Santa el dispositivo de seguridad será reforzado ante el previsible aumento en el que número de peregrinos. Este plan de seguridad, presentado a comienzos de semana, se divide en dos fases. La primera está enfocada a los días de Semana Santa y la segunda se prolongará hasta los meses estivales, cuando la ruta vive su auténtico boom.

Policías y gendarmes

En ese dispositivo participarán unidades de Tráfico, del Seprona, de Seguridad Ciudadana y el Escuadrón de Caballería de la Guardia Civil, con la colaboración en los tramos urbanos del Cuerpo Nacional de Policía, así como de la Policía Autonómica. Además, y por vez primera, dos gendarmes franceses, uno en Burgos (Castilla y León) y otro en Galicia colaborarán con los agentes españoles dentro del «Tratado de Prüm» de cooperación transfronteriza. Además de la presencia policial, la Delegación del Gobierno en Galicia puso en marcha una nueva campaña, enmarcada dentro del Plan de Seguridad Jacobea 2017, con carteles situados en puntos concretos del Camino de Santiago que, bajo el lema «Guardia Civil. Protegemos el camino, cuidamos del peregrinaje», recuerdan dónde está el puesto más cercano, así como el número en el que llamar para pedir ayuda.

Santiago Villanueva, delegado en la Comunidad, precisó que el pasado año participaron en ese plan de seguridad en el Camino más de 1.000 guardias civiles, que realizaron unas 2.500 intervenciones, aunque apenas hubo hechos delictivos. Por su parte, la directora de Turismo de Galicia, Nava Castro, confirmó que en lo que va de año ya han transitado por las rutas jacobeas en Galicia más de 13.000 peregrinos y se espera que en los próximos días hagan el Camino «más de 10.000 personas».

Garantizar su seguridad y evitar problemas es el objetivo del plan presentado esta semana y de otras iniciativas que ha puesto en marcha la Administración en Galicia. Entre ellas, el reparto de folletos con normas acerca de la seguridad en el Camino de Santiago y cubremochilas para hacer más visibles a los peregrinos cuando transiten por la vía pública. También se han reforzado las señalizaciones de tráfico para evitar accidentes en puntos conflictivos.