La Puerta del Perdón de la iglesia de Santiago de Villafranca del Bierzo fue la meta que alcanzaron en el día de ayer los peregrinos que han ‘desempolvado’ el Camino Olvidado, recorriendo, desde el pasado 29 de abril, los más de 300 kilómetros que separan Bilbao de Villafranca del Bierzo.
«Esta primera marcha promocional del Camino Olvidado lo que quiere demostrar es que el camino se puede recorrer, que está perfectamente señalizado, además los sesenta peregrinos que han realizado este peregrinaje se han encontrado con un trato excelente de todos los ayuntamientos y vecinos de los pueblos por los que ha pasado. Y de eso es de lo que se trata, de que lleven un buen recuerdo a sus lugares de origen, que lo cuenten y ver si este mismo verano ya se pueden tener resultados», señaló el presidente de la asociación de esta ruta jacobea por León, Alider Presa.
Una marcha promocional que también sirvió para testar las infraestrucutras con las que cuenta esta ruta que arranca en Bilbao y entronca con el Camino Francés en Villafranca del Bierzo. «Lo imprescindible es que haya infraestructuras, por lo menos al cominenzo y final de cada etapa. Hay que destacar que se ha hecho mucho trabajo en muy poco tiempo y en estos momentos ya hay en torno al 80% de las infraestructuras imprescindibles. Además, esta marcha ha servido para contactar con los alcaldes donde no había albergues para que se pongan lo más rápido posible manos a la obra para subsanar esta carencia». Desde el Ayuntamiento de Villafranca del Bierzo se hizo entrega de un diploma a los sesenta participantes que han realizado más de una etapa de esta opción de camino a Santiago.
