Apostol

El encuentro de jóvenes católicos en Santiago culmina con una llamada a vivir la fe cristiana

10 agosto 2010 / Mundicamino

El cardenal Rylko oficia una eucaristía ante 12.000 personas y rodeado de 48 obispos españoles.

Unos 12.000 jóvenes asistieron a una misa con ambiente festivo en el Estadio de San Lázaro en el marco de la ‘Peregrinación y Encuentro de jóvenes’ (PEJ 2010), que organiza la Iglesia en Santiago, tras cuatro días en donde han tenido lugar diversas catequesis, oraciones y conferencias con motivo del Año Santo.

El presidente del Pontificio Consejo para los Laicos, Stanislaw Rylko, celebró una eucaristía rodeado de 48 obispos de diferentes diócesis españolas colocados al lado de una gran cruz de madera, entre quienes se encontraban el cardenal de Madrid, el lucense Rouco Varela, el cardenal de Barcelona, Luis Martínez Sistach, o el obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla.

Junto a ellos, unos 400 sacerdotes vestidos de blanco han seguido la celebración sentados al lado de una pantalla gigante que ha retransmitido el evento.

Stanislaw Rylko leyó un discurso en el que ha valorado la importancia del Camino de Santiago, para lo cual ha recordado las palabras que pronunció Juan Pablo II durante su visita a Compostela en el año 1982, en las cuales invitaba a la “Vieja Europa” a “revivir sus orígenes históricos” y a “descubrir” sus raíces.

Durante su homilía, ha destacado que “Dios es la luz del mundo” en una sociedad que, a su juicio, vive “un tiempo confuso y tenebroso”. Así, ha criticado la “cultura posmoderna que domina la escena” en detrimento de la fe, y ha recriminado que hoy en día “no hay lugar para Dios en la vida pública”.

Por ello, el presidente del Pontificio Consejo para los Laicos ha invitado a los jóvenes a “no tener miedo” del evangelio, a lo que ha agregado que “no hay nada más falso” que la identificación del cristianismo con “un cúmulo de prohibiciones”.

Junto a esto, citó unas breves palabras del Papa Benedicto XVI en las que ha subrayado que “el gran problema del hombre de hoy es la cuestión sobre Dios”, así como “tantos problemas que no se resolverán sin él”.

“Patrono, sigue protegiéndonos siempre”, ha finalizado Rylko a la vez que emplazaba a los asistentes a tomar parte de la Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar en Madrid en 2011. Un envite que ha sido respondido desde las tribunas con un: “sí, sí, sí, nos vamos a Madrid”.

Comunión multitudinaria

Unos 130 sacerdotes del total congregado han sido los encargados de repartir las 12.000 hostias consagradas preparadas para la comunión. Con este objetivo, los eclesiásticos se repartieron por el terreno de juego y subieron a las gradas.

Durante la consagración de las hostias se guardó un silencio sepulcral, en el que sólo se oía el viento que se colaba por megafonía, con miles de personas arrodillándose al mismo tiempo.

Al final de la celebración y en un ambiente distendido, decenas de sacerdotes han terminado botando frente a la grada de Tribuna al ritmo del himno oficial de estas jornadas, reclamado por los participantes para que sonase por megafonía.

En todo el recinto se podían ver diferentes banderas y pendones con el nombre de las diócesis participantes.