El equipo de gobierno de Tapia ya ha perdido la cuenta del número de veces que se ha puesto en contacto con la Dirección General de Costas para pedir una actuación en el acantilado tapiego. No obstante, sigue enviando cumplida notificación de cada nuevo desprendimiento. El último, registrado hace unos días en el ribeiro de Represas, ha obligado a claususar el mirador y el merendero anexo y a aumentar la señalización de advertencia de peligro.
El alcalde de Tapia, Gervasio Acevedo, se ha entrevistado recientemente con responsables de Costas en Asturias sin éxito. «Lo único que explican es que están pendientes de crédito de Madrid para poder hacer algo», precisa. El regidor tapiego muestra su preocupación por la situación, ya que «es una actuación que no se puede demorar más».
Acevedo tiene previsto mantener hoy mismo otro encuentro con los responsables de Costas, a los que tratará de convencer de la necesidad de acometer una actuación «de envergadura» en el litoral tapiego. En la zona de Represas en concreto, los continuos desprendimientos amenazan con tragarse el Camino de Santiago que discurre paralelo al mirador clausurado. El equipo de gobierno de Tapia recuerda que el camino es un Bien de Interés Cultural (BIC) que hay que preservar. Además de ser paso obligado de peregrinos también se trata de un vial interior de gran uso para comunicar la villa con las parroquias costeras del municipio.
Dos carteles señalizan ahora el peligro y acompañan al cierre provisional colocado por los operarios municipales y que rodea las mesas del merendero. De continuar los desprendimientos no sólo supondrían una amenaza para el vial citado, sino también para el grupo de viviendas ubicadas al otro lado del camino.
El caso es que los de Represas no son los únicos problemas que se registran en la costa tapiega. También corre un serio riesgo la zona de El Cuitelo, en el barrio de San Sebastián, donde se ha tenido que cerrar un camino vecinal. Del mismo modo, en lo que va de año se ha registrado otro argayo en la playa tapiega de A Ribeiría (en el barrio de San Blas) que obligó a cerrar momentáneamente el acceso al arenal.
