Apostol

Torre de Babel en la zona vieja

25 agosto 2018 / Mundicamino

No hay visitante que se marche de Compostela sin hacerse su preciado ‘selfie’ con la Catedral.

Los caminantes inundan estos días la plaza del Obradoiro y Platerías.

Muchos aguantan estóicamente al sol, con el cobijo de paraguas, las colas para ver la Basílica y el Pórtico de la Gloria.

Compostela es estos días un hervidero de peregrinos. Alemán, italiano, francés o inglés son algunos de los idiomas que durante este mes se escuchan por las calles del casco histórico de la capital gallega, puesto que el número de personas que hacen el Camino de Santiago va en aumento y muchos de ellos son extranjeros. Nada menos que el 56 por ciento.

Sus lugares preferidos son, como no, la plaza del Obradoiro, donde es habitual encontrarlos descansando sobre sus piedras nada más llegar a Santiago; o haciéndose el correspondiente selfie con la fachada de la Catedral, que por fin luce, libre de andamios que puedan ensombrecer la foto de rigor.

Por supuesto, la Basílica compostelana es otro de los puntos más visitados por los caminantes, sobre todo, en los momentos que se celebra la Misa del Peregrino. Dentro del templo, lo más solicitado es el tradicional abrazo al Apóstol y la visita a su tumba. Además, ahora no solo hay colas en la plaza de Platerías para acceder a la Catedral, ya que se suman las del Obradoiro para visitar el recién rehabilitado Pórtico de la Gloria.

Asimismo, desde que un desaprensivo tuvo la desgraciada idea de pintarrajear a un apóstol de la fachada, éste ha adquirido protagonismo y son muchos los peregrinos y turistas que se acercan a comprobar cómo ha quedado la figura de la fachada de Platerías, la única románica que conserva el templo, tras borrarse el grafito.