Peregrinos chinos completaron ayer por la mañana la variante espiritual y embarcaron en Vilanova para seguir la ruta xacobea Mar de Arousa e Ulla.
El grupo de 33 peregrinos chinos que el sábado comenzaron el camino de Santiago por la variante espiritual de O Salnés, completó con éxito la peregrinación por la Ruta da Pedra e da Auga para llegar al filo de las dos de la tarde al puerto de Vilanova de Arousa. Los viajeros embarcaron en un catamarán para emular el itinerario que hicieron los discípulos del Apóstol, en una barquita por el mar de Arousa y el río Ulla, con sus restos mortales para enterrarlos lejos de la influencia de los romanos.
A primera hora de la mañana los peregrinos partieron de sus alojamientos en Armenteira, Meis, para adentrarse por la Ruta da Pedra e da Auga, que calificaron de maravillosa por sus paisajes, vegetación y manantiales. El itinerario contrastó con la primera etapa de la variante espiritual, de subida del monte Castrove por A Escusa, donde apenas encontraron sombra y agua para recuperarse.
A su llegada a Vilanova, pasando también junto a bodegas con viñedos de albariño que inmortalizaron con sus cámaras, los viajeros intentaron recuperar fuerzas con la degustación de marisco. Mejillones y nécoras fueron sus menús preferidos. «Es un viaje para repetir, tiene paisajes hermosos», manifestó uno de los peregrinos.
En el puerto de Vilanova embarcaron en catamarán para hacer la ruta xacobea hasta Pontecesures, donde pernoctaron. La siguiente etapa la realizan esta mañana por Padrón rumbo a Santiago de Compostela.
