Apostol

Vía Augusta

Etapa

5

Monumentos

Las Cabezas

Iglesia de San Juan Bautista

Ubicada en la zona más alta del pueblo, sobre un cabezo que domina una amplia llanura, en lugar de una gran importancia estratégica, constituye un elemento determinante en la imagen urbana de la población. Se construyó en una época de resurgimiento económico del municipio, sobre el lugar que ocupaba la antigua parroquia, situada a su vez sobre las antiguas ruinas del castillo de la localidad. Es un hito y una referencia en el paisaje de la marisma sobre la que se eleva en la distancia. Su interior muestra soluciones arquitectónicas y estilos del barroco y el neoclasicismo.

Ermita de San Roque

Se ubica junto a la Plaza de los Mártires del Pueblo. Fue construida entre los años 1955 y 1967, sobre el solar de la antigua ermita de la misma advocación. Es una iglesia de estilo funcional y moderno, que cuenta con una fachada principal a los pies elevada sobre gradas, y que aparece presidida por una sobria portada de dos cuerpos de altura, enmarcada entre pilastras lisas pareadas. Sobre estos dos cuerpos se eleva una sencilla espadaña con huecos para campanas a dos alturas, coronándose la fachada con una pequeña cruz de hierro. Alberga varias imágenes, como la de “Santa Ana con el Niño en brazos”, del XVIII, y un “Cristo atado a la columna”, de la escuela de Pedro Roldán.

Capilla de Jesús Cautivo

En 1993 se colocó la primera piedra, consagrándose en 2002 por el cardenal Monseñor Carlos Amigo Vallejo. A esta edificación le caracteriza el tener el campanario en una espadaña de tres cuerpos exenta y contigua al edificio principal de la capilla. Con una puerta muy grande, al objeto de dar cabida a los pasos de la Hermandad durante la Semana Santa, la capilla tiene el aspecto de una ermita y posee unos techos muy altos, resultando muy voluminosa en su diseño geométrico la apariencia de su nave rectangular. Alberga las imágenes titulares de dicha Hermandad: Nuestro Padre Jesús Cautivo -de Juan Bernabé Britto-, Nuestra Señora de los Remedios y San Juan Evangelista.

Laguna del Complejo Lebrija-Las Cabezas

El complejo endorreico Lebrija-Las Cabezas es el último reducto de un gran sistema lagunar que recorría toda la campiña entre Sevilla y Cádiz. La actividad humana lo ha limitado a las lagunas de la Cigarrera, Galiana, Peña, Pilón y Taraje (la única permanente), además de otras menores. Estas lagunas obtienen sus aguas, principalmente, del aporte de la lluvia, lo que sumado a un suelo poco permeable y alomado originan las lagunas en las zonas bajas. Los restos de una casa romana, en la laguna del Taraje, atestiguan una actividad agrícola temprana en la zona.

Sus orillas presentan vegetación típica de ribera, como tarajes, carrizos o eneas. Las lagunas de Lebrija-Las Cabezas tienen gran importancia para las aves, actuando como zona alternativa a Doñana para cría, reproducción y descanso durante las migraciones. Es fácil observar especies amenazadas como la focha cornuda o la malvasía cabeciblanca, y multitud de patos, garzas, pequeñas aves y rapaces.

Utrera

Utrera, estatua a Rodrigo Caro

Poeta, historiador, abogado y sacerdote católico del Siglo de Oro español, primera mitad del siglo XVII. Fue, sobre todo, arqueólogo, anticuario e historiador; tenía una gran biblioteca de clásicos y hasta un pequeño museo y escribió tanto en latín como en castellano. Un ilustrado avanzado a su tiempo.

Especial interés guardan sus Días geniales o lúdicos por la enorme cantidad de materiales folclóricos que contiene, ya que es un tratado sobre los juegos infantiles y de adultos en general que incluye también festejos, supersticiones, creencias, fiestas de toros, costumbres y celebraciones populares, todo servido con una profunda erudición. La obra circuló solamente en versión manuscrita y está escrita en una prosa digna de los mejores autores de nuestros Siglos de Oro; estaba definitivamente acabada en 1626. La Sociedad de Bibliófilos Andaluces la publicó de forma deficiente (Sevilla, 1884); Jean Pierre Etienvre publicó una edición más rigurosa (Madrid, 1978) en dos volúmenes.

Iglesia de Santa María de la Mesa

Está declarada Bien de Interés Cultural en calidad de Monumento Histórico-Artístico desde 1979. Forma parte del paisaje característico de Utrera, ya que su torre, al ser la edificación más alta de la ciudad, se puede ver desde cualquier punto. Se trata de un templo medieval que se reformó en el año 1401 y posteriormente en el siglo XVI, perteneciendo a esta segunda fase la portada de los pies y el crucero. Es un templo de grandes dimensiones, construido en ladrillo, cantería y mampostería, con cinco naves, la central de mayor altura, con seis tramos y crucero. Desde un punto de vista artístico, mezcla las formas góticas y renacentistas. La Puerta del Perdón presenta una rica decoración y un diseño atrevido para los cánones renacentistas conforme a los que está construida. Posiblemente se ubica donde antes hubo una mezquita.

Iglesia de Santiago el Mayor, detalle del tímpano

Iglesia parroquial declarada Bien de Interés Cultural en calidad de Monumento histórico-artístico desde 1977. Es un templo gótico del siglo XIV con una larga historia. Está ubicado en las proximidades del castillo. Su planta de tipo de salón se encuentra dividida por pilares fasciculados y cubiertas de bóvedas nervadas de gran belleza. Posteriormente, las naves se vieron completadas con cúpula renacentista y capillas barrocas y neoclásicas. Es digna de observar la veleta de dicha iglesia, con la imagen de Santiago Matamoros, la cual también aparece en el tímpano de la portada.

Santuario de la Consolación

Este templo está ubicado en las afueras de la ciudad, y se llega a él por un espacioso camino, hoy día convertido en paseo, flanqueado por el Parque de Consolación. En su interior se encuentra la patrona de la ciudad, Nuestra Señora de Consolación, destacando además su artesonado mudéjar y el altar mayor barroco. El edificio es de estilo barroco clasicista. Fue construido en el primer tercio del siglo XVII, sobre una ermita del siglo XVI dedicada a albergar la imagen de la Virgen de Consolación, que fue trasladada desde el desaparecido Convento de la Antigua. El 31 de marzo de 1561, la Orden de los Mínimos se hizo cargo de la ermita, levantaron su monasterio anexo a ésta, y más tarde la iglesia que se observa en la actualidad. Fue declarado Monumento histórico-artístico en 1982.

Puente de Las Alcantarillas

Es una de las construcciones más destacables que se conservan de época romana. Se trata de un puente de dos ojos, por el que, según la inscripción que figuraba en el mismo, discurría la Vía Augusta que enlazaba la Bética con el norte de la península. Sobre el pilar central aún puede leerse la inscripción AVGVSTVS PONTEM.

Cercano al mismo se alzaban dos baluartes defensivos, uno de los cuales ha sido recientemente restaurado. Está declarado Bien de Interés Cultural y Monumento Histórico-Artístico desde 1931.

Palacio de Vistahermosa

El antiguo palacio de Vistahermosa se sitúa en la Plaza de Gibaxa. Su portada rococó es de 1730. En su interior destacan sus salones románticos e historicistas. Actualmente es la sede del Ayuntamiento de Utrera.

Castillo de Utrera

Se encuentra sobre un cerro natural muy próximo a la parroquia de Santiago el Mayor. Está declarado Bien de Interés Cultural y Monumento Histórico-Artístico desde 1985. Fue construido por el Concejo de Sevilla sobre los restos de una antigua torre árabe. Aparece citado en 1264 por Alfonso X el Sabio. En 1368 fue destruido por Muhammed V de Granada y posteriormente reconstruido a finales del siglo XIV. Desde finales del XV ha permanecido abandonado hasta finales del siglo XX, en el que se han realizado una serie de actuaciones destinadas a su recuperación para uso público.

Pasaje del Niño Perdido

Este conjunto arquitectónico fue una antigua judería con sinagoga, transformada a lo largo del tiempo en hospital, iglesia, cementerio y casa de expósitos. Actualmente esta zona acoge varias viviendas particulares y bares de copas, aunque sigue siendo uno de los lugares más característicos y representativos del casco antiguo utrerano.

Plaza del Altozano

El tipo de casa histórica utrerana presenta como característica la humildad de sus materiales —mampostería de argamasa, ladrillos, teja árabe y cal— y la uniformidad de sus fachadas. El casco antiguo de Utrera presenta un estilo característico marcado por la sobriedad de estas construcciones. Aún se conserva un conjunto importante de casas del siglo XVIII, como las que ocupan el flanco norte de la Plaza del Altozano, así como algunas pocas que datan de los siglos XVI y XVI.

Arco de la Villa

En diferentes zonas del casco histórico se conservan algunos restos de la muralla medieval, entre los que se encuentran el Arco de la Villa, el Portillo de la Misericordia y algunas torres como las de la Plaza de la Constitución, la Plaza del Altozano y la calle Álvarez Hazañas. El Arco de la Villa, recientemente restaurado, era una de las puertas de entrada a la ciudad. En su estructura presenta vanos apuntados, y una capilla barroca en el piso alto.

Fuente de los Ocho Caños

Es una antigua fuente restaurada, de planta octogonal y con una cubierta a modo de templete. Está situada al final de la calle Cristo de los Afligidos, cerca de la puerta medieval del Arco de la Villa, en el exterior del recinto amurallado. La cubierta está adornada por paños de azulejos sevillanos y se sostiene sobre ocho arcos de medio punto. Bajo cada arco posee un grifo que desagua en la pila que rodea toda la estructura. Su función era la de aprovisionar de agua a los habitantes de la villa y abrevar al ganado.