Apostol

Camino de Baztán

Tramos

Ustaritz-Urdax

21.5 km

1. Ustaritz - Urdax - 21.5 km

Iniciamos la etapa en el mismo punto donde finalizó la primera: frente a la iglesia de Ustaritz.

Da la sensación de haber sido recientemente restaurada. La piedra luce como nueva en sus muros. Está rodeada de zona ajardinada, con un monumento a un lado que representa un soldado de la Gran Guerra.

Frente a su puerta pasa una calle asfaltada que tomamos en dirección sur (es decir, según miramos la calle desde la puerta de la iglesia, caminaremos a la derecha).

Poco más adelante hay un cruce. Seguimos rectos, por la rue de Bourg.Llegamos a un cruce con carretera de bastante tráfico. Pasamos al otro lado y continuamos por asfalto, (por el desvío central), dejando a la derecha Casa Bidekurutzea.

Circulamos por la carretera D250. Vegetación boscosa a ambos lados. Setos de cierta altura, con abundancia de saúcos.

Una señal del Camino de Santiago nos indica en un cruce que hemos de seguir por la carretera. Cuatro minutos después pasamos por un puente. El bosque continúa.

Cruce.

Una marca indicadora de la ruta jacobea colocada en una señal de tráfico nos indica la desviación a la izquierda, en dirección Etxehasia. Olvidamos así la carretera 250 y seguimos por carretil asfaltado más estrecho y tranquilo.

Tras subir una cuesta abandonamos el bosque y salimos a zona despejada, con una urbanización de chalets diseminados en una zona intensamente verde. Seguimos en ligero ascenso.

Hay mucha vegetación de jardín.

Superada la urbanización la carretera se estrecha ligeramente y continúa entre alambradas que cercan numerosas praderas.Desechando desviaciones hemos de cruzar una regata.

Haciendo funciones de puente hay tres vigas de hierro que suponemos, en su día, soportaron una estructura de madera sobre ellas. El paso, realizado con cuidado, no reviste peligro.

Al otro lado el camino se abre a zona de monte bajo. Girando a la izquierda pisamos por zona algo embarrada. Como vamos con la regata a la izquierda, el bosque de ribera nos acompaña unos metros, con plátanos de sombra y olmos.

Enseguida pasamos otros dos puentecillos de madera sobre regatas que desaguan en la principal. Después iniciamos ascenso, con una curva cerrada que se aleja hacia la derecha de la regata.

Tras una curva, que tiene la señal jacobea en una estaca, se suaviza la pendiente, pero después de trazar otra curva volvemos a ascender.

Cruzamos carretera en un cruce múltiple y seguimos, en ascenso por el camino de enfrente. En pocos metros tomamos, señalizada, la opción de la derecha.

El terreno es ondulado, por camino recto. Marchamos por una especie de loma amplia que abajo, a su derecha, nos permite divisar Zouraïde, población a la que nos vamos acercando.

Acacias y castaños crecen también a los lados del camino en bosquetes que se alternan con el monte bajo.

Torcemos a la derecha, bajo dos hermosos ejemplares de roble, al lado de una alambrada.

La señal del camino está muy clara, colocada en una de las estacas. Dos minutos después, tras pasar entre robles ,tomamos un carretil en descenso, de frente. A 200 metros hay una bifurcación. Seguimos recto, por la pared de un chalet.

Muchos chalets diseminados. Vamos en descenso. Algunos prados están cercados con «pastores eléctricos».

El carretil, tras varios cruces bien señalizados por marcas del Camino de Santiago, se acerca primero a una carretera más ancha y después de girar a la derecha llegamos en 100 metros (tras cruzar un puente) a otra carretera de intenso tráfico (la D918) procedente de Espelette/Ezpeleta.

Vamos a la derecha, hacia el cercano pueblo de Zouraïde.

Zuraide.

Pequeña localidad, El caserío está muy disperso. Nos acercamos hacia la iglesia por la carretera.

2:18 – 50 metros antes de llegar a una rotonda delante de la iglesia tomamos calle-carretera que se desvía a la izquierda en ascenso, por el «Chemin de Xapitalea – Xapitaleko bidea».

Pronto se inicia un ascenso fuerte. En un pequeño descansillo torcemos a la izquierda. A los 500 metros se suaviza algo. Pero el ascenso sigue.

Cruce en el alto de Pinodieta.

Carretera con bastante tráfico (D 20). Une Espelette con Ainhoa. La cruzamos. Hay un total de hasta seis vías asfaltadas de diferente importancia que confluyen en el mismo punto. Seguimos por la que tenemos justo enfrente (dejando dos a cada lado). En la señal del Camino de Santiago clavada en una estaca dice: «Chemin de Saint Jacques – Camino del Baztan».

El ascenso continúa suavemente, entre alambradas. Pronto tomamos una desviación a la derecha por camino sin asfaltar, con piso de grava.

Tres hermosos robles , quedan a la izquierda del camino.

En otro desvío, inmediatamente, tomamos la opción izquierda, recto y en ascenso.

Paso canadiense. Dos vallas de madera lo flanquean.

El monte Erebi (así figura en los mapas) tiene una altitud de 582 m y queda a nuestra izquierda.

Marchamos en ascenso por sus laderas, buscando el paso que nos permita descender a Ainhoa.

El camino es claro, rodeado de alambradas y con vistosas dedaleras (Digitalis purpurea), abundantes entre el matorral junto a la alambrada.

Seguimos ascendiendo hasta alcanzar la máxima altura del camino y de la ruta (en torno a los 300 metros). A la derecha el paisaje se abre y se extiende hacia Ainhoa, Sara y el monte La Rhune.

Alcanzamos la altitud máxima y empezamos a descender con claridad, después de superar un conjunto de árboles que parecen haber sido quemados por algún rayo.

El camino baja entre helechales  para sumergirse en un bosque que ocupa el fondo de las laderas. Vemos Ainhoa abajo, en el valle. El monte La Rhune cierra el horizonte.

Seis minutos después superamos el arroyo que baja por el barranco y giramos bruscamente a la derecha. En el bosque abundan los castaños además de los robles. Cerca del cauce crecen también los plátanos de sombra .

El desnivel se acentúa y bajamos (si el suelo está húmedo), con cierto cuidado por tierra arcillosa mezclada con piedras. Después pasamos otra vez a terreno llano.Salimos del bosque.

A la vista de Ainhoa hemos de fijarnos bien para torcer, en la primera bifurcación, a la derecha.

La dirección está marcada en una estaca.

Vamos alternativamente entre zonas abiertas y zonas boscosas.

Llegamos al centro de Ainhoa.

Enfrente tenemos la iglesia y el cementerio a su alrededor (cosa habitual en Iparralde). Por delante pasa la carretera que cruza la localidad.

Giramos a la izquierda, pasando al otro lado de la calzada.

En la primera curva abandonamos esta carretera por calle descendente hacia una plazoleta con pavimento de piedra en un círculo.

Seguimos por la derecha de la casa que tenemos enfrente. Salimos del pueblo por camino asfaltado y tomamos a la derecha en el primer cruce. Otra vez estamos sumergidos en zona boscosa.

Pasamos cerca de la carretera general, pero sin llegar a tocarla nos desviamos a la derecha, por el barrio viejo de Dantxarinea (paralelos y a pocos metros de la arteria principal).

Por una calleja de gran encanto entramos en el viejo pueblo para acercarnos hasta la misma aduana sin soportar el tráfico.

En el primer cruce tomamos a la izquierda superando un arroyo y salimos a la carretera general.

Aduana de Dantxarinea.

Tras pasar la frontera seguimos por la carretera. Suele haber intenso tráfico de vehículos con matrícula francesa que pasan a hacer sus compras a las «Ventas».

Enseguida de pasar la frontera la carretera llega a una rotonda de la que sale a la derecha la carretera de Zugarramurdi, la localidad famosa por su cueva del akelarre.

Seguimos adelante por el arcén de la general. Un cartel anuncia también las grutas de Urdazubi/Urdax.

Si el tráfico es muy molesto puede ser interesante tomar una alternativa que narramos como variante un poco más adelante, y que se toma enseguida de pasar la rotonda del cruce de Zugarramurdi.

Salimos a camino cementado por el que llega desde la derecha el otro itinerario, el que salva la carretera desde la aduana. Vamos a la izquierda.

A 50 metros tomamos de nuevo a la derecha. De nuevo avanzamos por senda herbosa. Mucha vegetación a ambos lados. Setos frondosos. En 200 metros nos sumergimos en galería boscosa, con robles y avellanos.Bajamos y el camino se encaja junto al río Ugarana, que fluye en sentido contrario a nuestra marcha.

El sotobosque tiene acebo  y otras especies de zonas sombrías.

Al salir del bosque a terreno abierto vemos a la derecha un puente de piedra con barandilla metálica que lleva al otro lado hasta las cuevas, en el barrio de Leorlaz.

Mantenemos el camino que traíamos. A continuación, otra vez con profusa vegetación, ascendemos ligeramente. Enseguida salimos a zona abierta. Viene un camino de la izquierda que se une al nuestro. Seguimos en ascenso. Al frente queda la aguda silueta de

Salimos a la carretera de Urdax.

Descendemos. Enseguida vemos el pueblo de Urdax y la silueta del monasterio de San Salvador.

Tres minutos después, en una curva de la carretera a la derecha, nos desviamos a la izquierda por camino cementado hacia Iribere Auzoa. El camino está señalizado.

Bosque a la izquierda y prados abiertos a la derecha, por los que circula el río Ugarana.

Tras cruzar el puente sobre el río llegamos a la plaza abierta  en el centro de Urdax,

El río pasa junto al monasterio, y una regata que va a parar al molino, cruza también al otro lado.Fin de etapa.