Esta etapa, en la que seguimos pisando tierras aragonesas, con la vista siempre puesta en el emblemático Moncayo, nos ofrece, al paso del peregrino, lugares tan singulares como es La Ermita del Santo Sepulcro o el Santuario de La Misericordia, lugar este que quedará imborrable en el recuerdo.
Tras recorrer 4 Km. desde la salida de Borja, tendremos que superar un desnivel de 300 m. que en forma de meseta se prolonga en práctico descenso hasta la meta de esta etapa, que hemos situado en Tarazona, pasando antes por El Buste.