Apostol

Camino del Norte

Etapa

12

Monumentos

Noja

Iglesia de San Pedro

El edificio religioso más importante de Noja es la iglesia parroquial de San Pedro, localizada en el lugar que ocupara un antiguo monasterio altomedieval. Consta de una nave de dos tramos con capillas adosadas y una capilla mayor de planta cuadrada. Las cubiertas son de crucería estrellada. Comenzó a construirse a comienzos del siglo XVI y a finales de aquella centuria se añadieron las capillas de Nuestra Señora en el evangelio y de San Miguel en la epístola flanqueando la capilla mayor. A comienzos del siglo XVII se construyeron en la epístola la capilla para la cofradía de la Santa Cruz y en el evangelio la de María Fernández de Isla. Ésta custodia un monumento funerario, inspirado en el tratado de arquitectura de Vignola, que incluye las estatuas orantes de María Fernández de Isla y su esposo Gonzalo de Velasco Castillo. La torre, situada a los pies del templo, fue concluida a finales del siglo XVII (hacia 1691) y es deudora del barroco de los maestros de la Junta de Ribamontán.

Arquitectura Civil

A la entrada de Noja está la conocida como la «casa de la Torre», con magníficos escudos barrocos. Siguiendo el barrio Pedroso por la calle de los Pinares, está la casona de Assas, cuya entrada está flanqueada por una magnífica arboleda.

Completan el recorrido por las casonas la visita al Palacio de los Marqueses de Albaicín, magníficamente reformado por Rucabado y actual casa de cultura de Noja, la casa de los Garnica, en el barrio de Pedroso, que cuenta con magnífica portalada y la Casa palacio del Carmen, entre los barrios de Fonegra y Cabanzo. Las casas que forman el barrio Pedroso también merecen mención por conservar su estilo típicamente montañés y por último, reseñaremos la casa de don Manuel Morales, rediseñada en 1913 por el arquitecto cántabro Leonardo Rucabado.

Castillo Siete Villas

Iglesia Parroquial de San Pedro

Construido en el siglo XVI, muestra este templo elementos góticos en sus portadas de arco conopial, con florones y pináculos. El templo se inscribe dentro del estilo gótico, a pesar de que su ábside es renacentista. Una de sus portadas es de estilo flamígero ocurre en los templos de Heras, Valdecilla o Arnuero.

Ermita de San Pantaleón

La ermita de San Pantaleón se dibuja en lo alto de un peñasco que domina una pequeña vega. Este espectacular emplazamiento nos descubre una iglesia románica de pequeñas dimensiones.

La nave lateral es posterior y responde a una ampliación de la época gótica, como nos indica la bóveda de crucería de aristas en la cubierta.

La portada se configura como el elemento más característico de esta construcción. En el lado izquierdo, aparece una gran figura, con aspecto babilónico, muy enigmática.

En el lado derecho, un cuerpo alargado dibuja un zig zag que pudiera representar un rayo, o el bastón del mencionado Hércules.

Las arquivoltas presentan decoración lisa; en ellas aparecen recuadros tallados con pies y cabezas humanos, y una barcaza llena de gente. Resulta indudable que representa escenas del diluvio.

San Miguel de Meruelo

Iglesia Parroquial de San Miguel de Meruelo

Se trata de una iglesia con planta de cruz latina, cabecero rectangular y la torre a los pies. Su traza y condiciones se atribuyen a Juan de Naveda en su nave y torre se considera que fueron seguidos los diseños de Francisco del Cueto, maestro de cantería que intervino en el templo entre 1652 y 1681. Se trata de un templo con planta de cruz latina, cabecera rectangular y torre a los pies (concluída hacia 1673). Aloja un retablo mayor de comienzos del siglo XVIII, con traza de Lucas Ortiz, que fue construido por Francisco Albo Solar; concluido por Juan de Vierna y Vicente Ortiz, y profundamente reformado en el siglo XIX. Durante su restauración en 2003 se descubrieron pinturas murales datadas en el siglo XVII. Otras obras muebles de esta iglesia son el retablo de la Vera Cruz, el retablo de Nuestra Señora, en el lado del Evangelio, y un retablo churrigueresco situado también en el lado del Evangelio, realizado entre 1720 y 1730.

Bareyo

Santa María de Bareyo

Es uno de los templos más destacados del románico en Cantabria. Este extraordinario templo está fechado en torno al año 1070 y fue declarado «Bien de Interés Cultural» en 1978. Destacan sus proporciones monumentales. Su planta se estructura en una sola nave, ábside y pseudo crucero; éste último acaba en capillas absidales.

Su bellísimo ábside está dividido exteriormente en tres calles verticales mediante columnas terminadas en capiteles con cabezas cortadas y animales sobre los que reposa la cornisa, sostenida por canecillos.En la parte central del ábside se abren dos ventanas con arquivoltas de baquetones, escocias y guarda- polvos de puntas de diamante.

La torre campanario fue levantada en el siglo XX.

En el interior son muy hermosos el prebisterio y el ábside. El baptisterio alberga una excelente pila bautismal .También es interesante una talla de la Virgen con el Niño.(siglo XV).

Molino de la Venera

El molino de la Venera, construido en 1753.

Mientras que abundaban en toda Cantabria los molinos de río y los de mareas ( aprovechaban la fuerza de las mareas ), éste es uno de los escasos molinos mixtos ( de marea y de río ) que se conservan en la región. Se encuentra prácticamente inalterado con sus arquerías, presa, y ruedas.

En Bareyo llegaron a existir según los documentos ocho molinos de marea y 21 de río.

Güemes

Iglesia de San Vicente Mártir

De estilo renacentista, este templo es uno de los más hermosos de la provincia. Presenta una sola nave y está cubierta por bóvedas de crucería góticas y capilla lateral adosada al lado del Evangelio. La contrata de obras pone de manifiesto que su construcción comenzaba el día 17 de Abril de 1677 a cargo del maestro escultor Andrés de Monasterio.

Ermita de San Julián

Es una humilde construcción de estilo románico en su origen; fue reformada en el periodo gótico. Tuvo funciones de hospital para peregrinos del Camino de Santiago hasta el siglo XIX y aún hoy celebra una popular fiesta el primer sábado de Septiembre.

Galizano

Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción

Aunque la construcción de esta iglesia se inicia en 1580, no se concluye hasta fechas muy posteriores. La planta está formada por una nave central con cuatro capillas adosadas a los laterales, dos en el lado de la epístola y dos en el lado del evangelio, un ábside poligonal y torre a los pies. En la fachada existe un pórtico de tres entradas que da acceso a la portalada principal de estilo clásico, que se compone de un arco, dos columnas de orden dórico, arquitrabe, friso adornado con motivos circulares y bueyes y frontón.

Destaca en el retablo mayor, de estilo prechurrigeresco, el lienzo del Cristo de Burgos que se encuentra en el ático y la imagen de Nuestra Señora de la Asunción.

Somo

Santuario Ntra. Sra. de Latas

Entre los nucleos de Somo y Loredo nos encontramos uno de los santuarios más antiguos e importantes de nuestra región, en el cual se custodia la milagrosa imagen de la Virgen de Latas. Dicho santuario es mencionado en documentos del siglo VIII, sin embargo, el actual edificio data del XVI, posteriormente se le añadieron otras dependencias. En el siglo XVII fue un importante centro mariano que dependía directamente de los Jerónimos del Monte Corbán, afincados en el santuario hasta la disolución de las ordenes religiosas en el siglo XIX. La iglesia consta de nave cubierta con bóveda de crucería estrellada con terceletes, dos capillas adosadas a los laterales, coro a los pies y ábside poligonal, obra del maestro de cantería Francisco de la Puente Velasco y trazado por Juan de la Riera. La torre, situada a los pies, es de planta ochavada y de dos cuerpos rematados por un capitel cónico. En su interior cabe destacar el retablo romanista de la primera mitad del siglo XVII con esculturas de Juan de Palacios y la imagen gótica de la Patrona.

Santander

Biblioteca Menéndez Pelayo

Menéndez Pelayo legó a la ciudad de Santander la biblioteca que fue formando a lo largo de su vida que él estimaba como la «única obra mía de la que me encuentro medianamente satisfecho». Para ubicarla se decidió construir un edificio de nueva planta que sustituyera al original utilizado por don Marcelino y donado por éste a la ciudad. En el pequeño solar contiguo a la casa donde había nacido y vivido el polígrafo se elevaba un pabellón levantado en 1892 que había hecho las veces de despacho y biblioteca.

El arquitecto castreño Leonardo Rucabado (1875–1918) se encargó en 1917 de diseñar en el mismo solar el proyecto para las bibliotecas municipal –actual museo de Bellas Artes– y Menéndez Pelayo. El arquitecto respetó la estructura en tres naves del pabellón original, la central cubierta con una vidriera con el escudo real de España y las ventanas laterales con los escudos de las universidades Complutense, de Salamanca, Central y de Barcelona. En 1923, con la presencia de Alfonso XIII, se inauguró el conjunto. El estilo de ambas construcciones es una suma de citas historicistas que van desde el herreriano al barroco de los palacios montañeses.

En el patio de piedra, frente a la fachada principal de la biblioteca, se instaló una escultura de Mariano Benlliure dedicada a Marcelino Menéndez Pelayo.

Palacio de la Magdalena

El Palacio Real de la Magdalena es el edificio más emblemático de Santander, no tiene un estilo definido aunque se le cataloga como “pintoresquismo ecléctico”, una mezcla de estilos ingleses y franceses con incorporación de elementos típicos de la arquitectura montañesa. Se encuentra situado en la península del su mismo nombre, que tiene una extensión de 28 hectáreas.

En 1908 el Ayuntamiento de Santander comienza la construcción de un Palacio para los Reyes. Se realizó con la participación de todos los santanderinos mediante una suscripción popular.

El 4 de agosto de 1913 tiene lugar la llegada de Sus Majestades, para tomar posesión de la nueva residencia palaciega. Los Reyes veranean en Santander durante 17 años consecutivos hasta 1930.

En 1982 el palacio fue declarado “monumento histórico artístico”.

Desde esa fecha La Magdalena se utiliza como Palacio de Congresos y Reuniones.

La Catedral

Emplazada en el mismo lugar de la abadía de San Emeterio, fue edificada en el siglo XIV en estilo gótico, del cual no queda apenas nada ya que quedó muy afectada por el incendio de 1941. Su verdadera joya es la Cripta del Cristo, de principios del siglo XIII, comenzada en un estilo gótico muy temprano, de transición con el románico. Alberga en su interior los restos romanos descubiertos entre 1892- 1893. Según el escritor Azorín, contiene el alma, la verdadera esencia de Cantabria. Igualmente dentro del templo catedralicio son dignos de admirar el valiosísimo Retablo Mayor y el maravilloso Claustro Gótico.

El Gran Casino Sardinero

Construido en la década de los años 20, El Gran Casino Sardinero es un regio edificio de grandes ventanales y amplias terrazas con unas inmejorables vistas sobre la Playa de El Sardinero y el abra de de El Sardinero.

Fue el principal lugar de ocio de los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia durante sus años de veraneo en esta ciudad.

Está dotado de una sala de exposiciones, un salón para ruedas de prensa o reuniones, dos salones de banquetes y un restaurante a la carta para unos 380 comensales, además del magnífico salón dejuegos y sala de máquinas.

Plaza Porticada

La Plaza Porticada es un claro ejemplo de arquitectura neo-herreriana, utilizada en la reconstrucción del centro de la ciudad después del incendio de 1941. Fue el lugar donde desde el año 1952 hasta el 1990 se realizaba el Festival Internacional de Música y Danza de Santander, hoy en día trasladado al Palacio de Festivales. En el interior de la plaza se encuentra la Oficina Regional de Turismo.

Iglesia de la Anunciación

La fachada es del siglo XVII, buena muestra del clasicismo vallisoletano. Muy típica en iglesias jesuitas, con un cuerpo central más alto al que se adosan dos laterales más estrechos y bajos.

La puerta, de medio punto, se enmarca por pilastras dobles que sostienen entablamento y frontón partido para encajar una hornacina con la imagen de la Virgen. El segundo piso de este cuerpo central lo ocupa una gran ventana rectangular y dos magníficos escudos barrocos de grandes dimensiones a cada lado. Se trata de los escudos pertenecientes al primer marqués de Villapuente que aportó el dinero necesario para concluir el edificio.

Iglesia de la Consolación

Es de estilo barroco y tiene una única nave con crucero. En su fachada se observa un pórtico rehundido bajo arco de medio punto, dentro del cual se organiza la entrada, enmarcada por pilastras. Se edificó en 1772, siendo maestro cantero Francisco Perez del Hoyo. Ocupa el solar donde estuvo en el siglo XIV un hospital y una pequeña capilla dedicada a Nuestra Señora de la Consolación. En la actualidad se encuentra un poco desmarcada del centro urbano, aunque durante la Edad Moderna esta era una de las zonas más dinámicas de la ciudad

Museo regional de Prehistoria y Arqueología

En 1.926 fue inaugurado por S.M. el rey Alfonso XIII en los locales del Instituto de Enseñanza media de Santander, y allí permaneció hasta que en 1.941 se instala con «carácter provisional», en el lugar que ocupa actualmente.

Este Museo recoge diversas colecciones de objetos que dan testimonio de la vida y costumbres de nuestros antepasados, reflejando desde la prehistoria hasta la Edad Media. Podremos contemplar las famosas estelas cántabras, entre otras piezas de gran valor.