Alcalá la Real
Iglesia de San Antón
La actual iglesia de San Antón se levanta sobre lo que ocupaba una pequeña ermita, construida en el siglo XVI. Junto a ella, se levantaba una hermosa cruz de piedra, de la misma época y desmontada en 1964. Se comenzó a edificar en 1744.
Es barroca en su composición, contrastando los muros sobrios y planos de su interior con los caprichos decorativos de la portada. En su interior, esta decoración se circunscribe al establamento de yesería. La fachada se divide en tres cuerpos: en el primero, destaca la portada con arco de medio punto muy moldurado, flanqueado por pilastras toscanas; el segundo presenta una hornacina enmarcada por columnas jónicas y pináculos; por último, remata la fachada una espadaña adornada con alerones.
Iglesia Mayor Abacial
La iglesia Mayor Abacial fue erigida para la Abadía de patronato real con sede en dicha ciudad. Se comenzó en 1530 y fue construida sobre otra anterior de corte gótico.
La actual, imponente como corresponde a un edificio fronterizo, consta de 3 partes bien diferenciadas, pertenecientes a diferentes épocas La primera, fue proyectada por Martín de Bolívar.
Está sustentada por cuatro pilares interiores que junto a los contrafuertes exteriores, que se ven en la fachada y muros laterales, sostienen las bóvedas de crucería estrellada. Su minuciosa decoración tiene una fuerte raíz gótica e influencias del plateresco. La Segunda parte corresponde al cuerpo de la iglesia, proyectada por Ambrosio de Vico. Se trata de una sola nave con bóveda rebajada de ladrillo que estaba decorada con frescos de la familia Raxis. La tercera parte corresponde a la cabecera, y vuelve a la arquitectura de tres naves.
Fortaleza de La Mota
El conjunto histórico monumental de La Mota está enclavado estratégicamente en la cumbre de un escarpado cerro, a 1.033 metros sobre el nivel del mar, y a 80-100 metros respecto de la ciudad que se encuentra a sus pies. El cerro de la Mota presenta una forma elíptica en su parte amurallada. Estas características, forma y situación, le dan una visión predominante, a modo de perfecta atalaya natural, que domina el paisaje en varios kilómetros a la redonda. Decir la Mota es hablar de la memoria histórica de Alcalá. Recientes hallazgos arqueológicos testimonian que en ella se fueron asentando diferentes culturas desde la Prehistoria. La Mota fue, pues, lugar de encuentro, enfrentamientos y mezclas de culturas diversas e incluso antagónicas. El mismo nombre de la ciudad testifica este hecho. Alfonso XI, interesado en que este estratégico lugar dependiera exclusivamente de la Corona, fundó una Abadía de Patronato Real, al tiempo que la dotó de especiales privilegios como la exención de impuestos, hecho que, indudablemente, repercutió en una ingente migración de nuevos pobladores a la zona, sobre todo, a partir de la conquista de Granada en 1492.
Iglesia de la Consolación o Santa María la Mayor
Es la gran iglesia de Alcalá por excelencia. A este privilegio contribuyen su localización, dimensiones y el encontrarse en ella la imagen de la patrona de Alcalá, la Virgen de las Mercedes, cuya festividad se celebra el 15 de agosto. La actual imagen de la Virgen, modelada por Garnelo Alda y esculpida por Martín Simón en 1938, es una copia de la anterior talla renacentista.
La planta de la iglesia de Consolación es de cruz latina inscrita en un rectángulo.bóveda de ladrillo enlucida con mortero, simulando sillería de piedra. Los arcos fajones, a su vez, descansan en los contrafuertes exteriores y, entre estos, se levantan las pequeñas capillas laterales.
La fachada, simétrica, tal y como mandan los patrones del último renacimiento, se caracteriza por concentrar su ornamentación en la portada. Se divide en dos pisos. El inferior contiene un arco de medio punto moldurado y flanqueado por dos pares de columnas, que sostiene unas hornacinas con las imágenes de los patronos fundadores de la orden, como reza en el friso del entablamento. El piso superior, de composición triangular, consta de un templete en el que se alberga la imagen titular del templo.
Es digno de mención un rincón importante de la iglesia, situado en uno de sus laterales. Nos referimos al Toril, antiguo claustro del convento franciscano con un amplio patio cuadrado,
Alcazaba
Recinto fortificado de forma triangular que consta de tres torres: la Torre del Homenaje, la Torre de la Campana (también llamada Torre de la Vela) y la Torre Mocha. La Torre del Homenaje es la mayor de las tres, Sierra Nevada hacia el Sur. Ambas edificaciones son un hito visual para toda la ciudad y la comarca circundante, desarrollándose en la actualidad importantes obras de rehabilitación en las mismas.
En la estructura urbana de la fortaleza de la Mota resalta la zona militar o alcazaba, a una altitud de 1033 metros. En ella se instalaba el cuartel general a las órdenes directas del gobernador. Se sitúa en la parte nordeste, en el extremo de la ciudad fortificada y se independiza del resto de la ciudad por los lienzos de murallas que se extienden entre la torre del Homenaje, Vela o Campana y Mocha.
En la parte oriental presenta una puerta tapiada que comunica, por medio de un pasadizo, con el huerto de Moriana, donde se encuentra un pozo de agua que fue crucial para la conquista definitiva de la fortaleza musulmana.
Calle típica
En la actualidad sufre un progresivo proceso de deterioro y abandono, tanto en sus edificios como en sus locales comerciales, ya que la actividad económica alcalaína tiende a desplazarse hacia el sur, buscando las grandes avenidas y nuevos barrios que se construyen en torno a la Avenida de Andalucía y Avenida de Iberoamérica.
Estas viviendas presentan un esquema constructivo común, con tres plantas, algunas con terraza, planta baja dedicada al comercio, fachadas profusamente decoradas con molduras y azulejos, cierres y balconadas al exterior, reducción máxima del patio o ausencia del mismo, especial realce de la escalera en forma de caracol o elíptica, zócalos de estuco o azulejo, y techos con pinturas decorativas. Mención especial merecen los magníficos trabajos en forja realizados en talleres alcalaínos, tradición que se ha ido manteniendo desde entonces y que hoy tiene su máximo exponente en los trabajos de la Cooperativa San José Artesano.
Aldea de Puertollano
Ventas del Carrizal
Alcaudete
Iglesia de Santa María
La planta de la iglesia es rectangular. Está dividida en tres naves, que dividen transversalmente a cada nave en cinco tramos de una longitud de 6 m aproximadamente, menos el tramo de la cabecera que es de 4 m. La planta de estos pilares suele ser hexagonal con lados irregulares; los pilares de la cabecera son los de mayores proporciones y su planta es romboidal; las plantas de las pilastras son aún más complejas: semiromboidales, rectangulares y poligonales.
El alzado de la iglesia presenta en altura tres naves divididas por dos hileras paralelas de pilares y arcos ojivales que la recorren de pies a cabeza, acentuando su sentido longitudinal y haciendo desaparecer en altura la articulación de tramos transversales a las naves al no existir arcos ojivales perpiaños. Esto no ocurrirá en el tramo transversal de la cabecera, ya que aparecerán arcos perpiaños que permiten una cubrición distinta del resto de la iglesia, a base de bóvedas de nervios. Los pilares se transforman en delgados haces de molduras cóncavo-convexas, cuyas basas se presentan a distinta altura, y sus capiteles se han convertido en una franja o capitel corrido, con motivos vegetales que forman la típica decoración del «crochet» gótico. Los arcos ojivales no son muy agudos, presentando un foco de 7 m de anchura por 1,5 m de altura. El perfil de estos arcos mostraría la continuación y prolongación de las molduras correspondientes a los lados longitudinales de cada pilar. Los muros de la iglesia aparecen lisos y cerrados en su parte N. y E., mientras que se abren por unos tragaluces y puerta oriental por el lado S., y por el lado O., a través de la puerta del Perdón.
Por último, la cubierta de la iglesia es a dos aguas, por lo que presenta una altura desigual de las naves laterales, más bajas que la central. Exteriormente, a los pies de la iglesia, ésta adoptará una peculiar forma en hastial. Interiormente, la cubierta estuvo constituida por un artesonado de madera, que desgraciadamente ha desaparecido, salvo en el tramo transversal de la cabecera donde la cubrición se hizo con bóvedas de nervios
Parque
En la parte nueva nos encontramos este parque público, lugar de recreo y también de refugio para resguardarse de los calores de verano. Es éste uno de los más amplios y cuidados parques de la provincia. Destaca por su componente vegetal, definido por una arboleda madura y variada, formada por raras especies de otras latitudes como los tilos, castaños de indias, carias y fresnos.
Castillo
El alcázar fue centro de protección de una madina comercialmente muy activa, ubicado en una importante red viaria y comercial y fue militarmente codiciado tanto por musulmanes como por cristianos.
De estas primitivas defensas no quedan restos, debido a la significativa reestructuración que sufre el conjunto defensivo en época almohade. En este período, el núcleo de población se rodea de una muralla y en la cumbre del cerro se edifica un alcázar construido con tapial de tierra sobre basamento de mampostería.
El Castillo actual, construido sobre el alcázar almohade, es un exponente de fortaleza de frontera del S. XIII-XIV. Las murallas y torres, construidas con tapial serán reforzadas con mamposteria tras la conquista cristiana en 1246, por los frailes de la Orden de Calatrava. Conservan los adarves o ronda de la guardia a través de los cuales podemos recorrer todo su recinto y acceder al interior de las torres. Destacan el refectorio y caballerizas así como la imponente torre del homenaje.
Fue declarado Monumento Histórico en 1985.