Apostol

Vía de Bayona

Etapa

11

Cultura

Briviesca

Cultura

Prádanos de Bureba

Villa, denominada entonces Prádano, en la cuadrilla de Prádano, una de las siete en que se dividía la Merindad de Bureba perteneciente al partido de Bureba, jurisdicción de realengo con regidor pedáneo.
A la caída del Antiguo Régimen queda constituida como ayuntamiento constitucional del mismo nombre en el partido Briviesca, región de Castilla la Vieja.

Castil de Peones

A la caída del Antiguo Régimen queda constituida como ayuntamiento constitucional del mismo nombre en el partido Briviesca , región de Castilla la Vieja.
Cruzan la población dos ríos, el Pecezorio y el Oca, sobre el que hay dos puentes y dos molinos harineros.

Revillagodos

Lugar , en la categoría de pueblos solos, perteneciente a la Merindad de Bureba, jurisdicción de abadengo ejercidad por el Monasterio de Santa María la Real de Las Huelgas cuya abadesa nombraba su alcalde pedáneo.
A la caída del Antiguo Régimen se constituye en ayuntamiento constitucional, denominado entonces Revillagodos de Bureba, en el constituida como ayuntamiento constitucional del mismo nombre en el partido Briviesca , región de Castilla la Vieja.

Quintanavides

Villa, en la cuadrilla de Prádano, una de las siete en que se dividía la Merindad de Bureba perteneciente al partido de Bureba. Jurisdicción de realengo con regidor pedáneo.
A la caída del Antiguo Régimen queda constituida en ayuntamiento constitucional del mismo nombre, en el partido Briviesca, región de Castilla la Vieja.
En un documento de San Salvador de Oña la villa aparece citada en 1033 como Quintana de Donvides.
Por el pueblo pasa una Antigua Calzada Romana y es punto de paso del camino de Santiago. (Via de Bayona)

Santa Olalla de Bureba

La primera mención escrita que hace referencia a Santa Olalla de Bureba data del año 1011, cuando don Sancho I la cita en el documento fundacional del Monasterio de San Salvador de Oña. El conde de los Buenos Fueros, como se le conocía, hizo abadesa y señora del mismo a su hija Tigridia y entregó al monasterio la mitad de la hacienda que poseía en Santa Olalla de Bureba.
Durante la época medieval y moderna la población de Santa Olalla de Bureba no fue alta; en el siglo XIII aparece en la relación de préstamos de la diócesis de Burgos con 13 maravedises, lo que supone que su población no pasara de cien habitantes. Ya en el año 1591 la población de había duplicado; mientras que en el año 1843 cuenta con 144 habitantes. Sus vecinos vivían de la explotación de sus cultivos de lino y de una cantera de jaspe. También, ya en el siglo XVIII, cuando Santa Olalla de Bureba figura en la cuadrilla de Prádanos, una de las siete en las que se dividía la Bureba, comenzaron a aprovecharse del Camino real de Madrid a Francia. En el siglo XIX llegó el ferrocarril y a mitad de siglo ya funcionaba el tren de vía única de Madrid a Paris. En el siglo XX el término de Santa Olalla de Bureba es de paso obligado de todas las redes de servicios entre la meseta superior, el Valle del Ebro y Europa, así que por su término municipal, cosas de geografía, pasa un gasoducto, un oleoducto, la Nacional I, el ferrocarril, la autopista Burgos-Málaga, el Camino de Santiago, el de Quintanavides… Esta capacidad de servicio ha beneficiado mucho económica y socialmente a la localidad de Santa Olalla de Bureba, que, por otro lado, ha padecido también un gran descenso de población debido a la evolución industrial.

Monasterio de Rodilla

Por estos mismos parajes cruzaba la calzada romana que, tanto desde Aquitania como desde Zaragoza, se dirigían unidas hasta la antigua Artúrica, hoy Astorga. Por aquí, dicha calzada salvaba los repechos de la brújula, que divide las cuencas del Ebro y del Duero. Precisamente muy cerca de este lugar se halla una meseta donde se han encontrado vestigios de la romana ciudad de Tritium, que cita Antonio en su itinerario.
El castillo de la localidad se encuentra ubicado sobre una impresionante peña rocosa desde la que se contempla una espléndida panorámica de la comarca de La Bureba. La fortaleza aparece nombrada por primera vez en un documento del año 1011, aunque seguramente fue erigida más de un siglo antes. Con la muerte de Sancho III el Grande toda la Bureba pasó a ser territorio de Navarra hasta la batalla de Atapuerca en 1054, año en el que los navarros abandonaron la fortaleza y la comarca retornó a Castilla. En el siglo XIV el castillo formaba parte de las propiedades de los Velasco, pero tal vez por su ya escasa importancia estratégica a partir de este siglo sufrió continuos cambios de dueños